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El legado de Johan Cruyff, a cinco años de su deceso: Cómo 'El Flaco' dio forma al Ajax, Barça y al futbol mundial

La muerte de Cruyff en 2016 conmocionó al mundo de fútbol, pero su presencia perdura dentro de los equipos grandes y sus entrenadores. David Davies/Offside via Getty Images

Debajo de la estatua de Johan Cruyff que se ubica a las afueras del Camp Nou, estadio al que el Barcelona llama su hogar, se encuentra escrita la frase "Salid y disfrutad". Eso fue precisamente lo que Cruyff dijo a su plantilla culé antes de imponerse en la final de la Copa de Europa de 1992 ante la Sampdoria, triunfo que les hizo merecedor del calificativo de "Equipo Soñado".

Cruyff murió hace cinco años, exactamente el 24 de marzo de 2016, luego de una prolongada batalla contra el cáncer; y esa estatua en Barcelona es apenas el primer guiño a un legado que se extiende mucho más allá de un solo club. "El Flaco" vive a través de su Fundación, que beneficia a más de 200.000 niños de todo el mundo. Luego están los centros educativos: cinco Institutos Cruyff, tres Academias Cruyff y cuatro Cruyff Colleges, expandidos por México, Perú, España y los Países Bajos. También tenemos la exitosa línea de ropa y calzados marca Cruyff, al igual que Cruyff Football, un portal de entrenamiento que tiene el objetivo de divulgar e impartir su filosofía de cómo jugar al balompié. En pocas palabras, hablamos de una religión futbolística.

Si vemos a los mejores equipos de Europa de la actualidad, encontraremos elementos de la filosofía de Cruyff que siguen floreciendo por las canchas del Viejo Continente. El fútbol fluido del Manchester City de Pep Guardiola (que se mantiene en pie de lucha por el cuadruplete en Inglaterra y Europa) es una versión evolucionada del estilo del Barcelona cuando Pep jugaba a las ordenes de Cruyff. Percibimos elementos del Cruyffismo en la manera cómo opera la presión alta de Jurgen Klopp en el Liverpool. El volante del Bayern Múnich Joshua Kimmich es el arquetípico "jugador Cruyff", con su habilidad para cambiar de posiciones con naturalidad. En medio de todos los debates sobre el estilo en contra de la sustancia, del "juego bonito" en contra de "jugar para ganar", Cruyff casó estilo y éxitos de una forma que la mayoría de los equipos de élite aspiran imitar.

Su ADN e ideas tácticas también corren por las venas del legendario Ajax de Holanda: Cruyff ayudó al equipo a refundar su cantera en 2012, en la que se formaron figuras de la talla del defensor de la Juventus Matthijs de Ligt y al mediocampista blaugrana Frenkie de Jong; al igual que a la generación dorada de la selección de España entre 2008 y 2014, periodo en el cual La Roja ganó la Copa del Mundo de 2010, en medio de dos sobresalientes Campeonatos de Europa, siendo el único combinado nacional en repetir como campeones del continente. Asimismo, el holandés desempeñó un rol fundamental a la hora de influir en algunos de los mejores entrenadores del mundo, como Guardiola (quien ha laborado con el Barcelona, Bayern Munich y es actual técnico del City) y Arsene Wenger, el DT que ha fungido por más tiempo liderando el plantel del Arsenal.

"Johan Cruyff pintó la capilla", afirma Guardiola. "Y desde entonces, los técnicos del Barcelona se limitan a restaurarla o mejorarla".

Cruyff es al balompié lo que John Wooden ha representado para el baloncesto, o Bill Walsh al fútbol americano. Probablemente, una encarnación de la era moderna es la dinastía de Bill Belichick al mando de los New England Patriots. "La influencia de Johan Cruyff ha sido inmensa", prosigue Guardiola. "Cambió la mentalidad del Ajax y el Barcelona. Su influencia es incomparable. Es la persona más influyente en el mundo del fútbol de los últimos 50, 60 años. Nadie puede compararse con él".

Solo hay que mencionar los términos "Cruyff", "Cruyffismo", o la "Filosofía Cruyff" a los hinchas barcelonistas y éstos los asociarán con triunfos. Cruyff cosechó éxitos como jugador y trofeos como director técnico (con cuatro títulos consecutivos de La Liga de España y una victoria en Copa de Europa), perfeccionando un estilo caracterizado por el ataque implacable; estableciendo un camino claro a seguir para los jóvenes canteranos, desde la academia hasta el primer equipo. Los Cruyffistas apasionados lo defienden sin reparos, y sus ideales han sido motivo de divisiones en Juntas Directivas, el derrocamiento de presidentes y la contratación y despido de entrenadores.

En 2021, el Barcelona hace todo lo que puede para utilizar la inspiración de Cruyff en su búsqueda por volver a la cima del balompié europeo. Su flamante presidente Joan Laporta, quien comienza a ejercer su segundo periodo al mando de la institución, fue amigo cercano de Cruyff y su plataforma electoral se basó en la restauración de las ideas del holandés dentro del núcleo de un club en busca de una identidad.

Sin su presencia, no existiría una fábrica de talentos del Barça en La Masía; se podría argumentar que no habría un Guardiola, ni un Lionel Messi y mucho menos existiría el Barcelona que conocemos en la actualidad. En el quinto aniversario de su deceso, la filosofía y legado Cruyffistas siguen siendo increíblemente importantes para el Barcelona, y para el fútbol en su totalidad.

Cruyff, el jugador: 'Para la Directiva, era un rebelde'

Jordi, hijo de Johan, conversa desde China a través de Zoom. Actualmente, es director técnico del Shenzhen de la Superliga de ese país. Conoce bien el poder que conlleva su apellido y las puertas que éste puede abrir; sin embargo, intenta forjarse su propio camino dentro del mundo del balompié. No hay señas de nepotismo cuando describe a Johan como uno de los "inmortales" del fútbol.

"Él fue uno de los especiales, realmente estampó su sello en el fútbol como jugador y entrenador, de una forma revolucionaria", comentó Jordi a ESPN. "Tenía una mentalidad diferente. Cuando todos iban por la derecha, él iba por la izquierda".

El legado de Cruyff se divide principalmente entre quienes le recuerdan por la forma en la que revolucionó el balompié de los Países Bajos en la década de 1970, y aquellos que valoran los recuerdos de sus éxitos como director técnico del Barcelona entre 1988 y 1996.

Johan fue pionero de la década dorada de la "Naranja Mecánica" de los ’70. Si bien es cierto que Rinus Michels, mentor de Cruyff (galardonado por la FIFA como Entrenador del Siglo en 1999, quien lideró al Ajax para alcanzar cuatro títulos de la Eredivisie en la década de 1960, y al combinado de Holanda que alzó el Campeonato de Europa en 1988) fue el cerebro detrás del estilo táctico conocido como "Fútbol Total", que cambió el rostro de este deporte por completo; fue Cruyff quien lo personificó. En una disciplina deportiva previamente definida por las rígidas posiciones y marcaciones, el nativo de Ámsterdam puso de cabeza todos los criterios tácticos que imperaban en el balompié.

Su plantel se alineaba en formación 4-3-3, en vez de la típica 3-5-2, con fluidez posicional para todos los 10 jugadores de campo. Intercambiaban posiciones con elegancia a mitad del partido, todo con la intención de confundir a los rivales: si un mediocampista subía para asumir puestos de ataque, el defensor ubicado detrás de él también avanzaba. Asimismo, favorecían la presión agresiva con y sin posesión; por encima de todo, se les instruía que jugaran para entretener.

"A mi criterio, el fútbol es emotivo", Cruyff escribió en su libro póstumo "14: La autobiografía" (conocido también por su título en inglés "My Turn"): "Siempre he dicho que el futbol debe ser jugado hermosamente, con un estilo propositivo. Debe ser un espectáculo. El fútbol es un deporte que se juega con el cerebro. Debes encontrarte en el sitio correcto en el momento preciso, ni demasiado temprano, ni demasiado tarde".

Como creador enigmático, Cruyff y la selección de los Países Bajos clasificaron a la final de la Copa del Mundo de Alemania Occidental en 1974, y a pesar de caer 1-0 ante la Mannschaft de Franz Beckenbauer, sigue siendo considerado uno de los planteles más grandes del fútbol mundial de todos los tiempos.

Asimismo, Johan tenía su movimiento característico: el "Giro de Cruyff" (actualmente considerado como elemento básico del juego) que se destacó cuando, en fase de grupos del Mundial de 1974, el holandés era presionado por el defensor del combinado de Suecia Jan Olsson; sin embargo, le evadió arrastrando el balón hacia atrás, pasando por su pierna erguida para hacer un giro de 180 grados. "Para mí, lo más importante es lo que hizo con el balón", afirmó Ronald de Boer, ex jugador de la selección holandesa, a ESPN. "Era algo nuevo, que no mucha gente había visto antes de que él lo hiciera: la aceleración, el giro de Cruyff, su estilo de juego, la exigencia a sus compañeros sobre la cancha y el inagotable fútbol de presión".

"Solía provocarle mucho", expresa Jordi. "Le decía: 'Papa, no ganaste la final. Te llevaste todos los elogios, pero no la medalla de oro’. Y me respondía, sin cambiar nunca su respuesta: 'pero ¿sabes qué? Del [Mundial de] 1974, la gente recuerda al equipo perdedor, así de grande fue el impacto que causamos. Nadie se acuerda del ganador, sino de la revolución que provocamos y ese es un premio mayor, más grande que el color de la medalla: eso es un legado’".

La selección nacional de los Países Bajos mantiene gran respeto por su famosa camiseta 14, similar al que sienten en Argentina por la 10 de Diego Armando Maradona, o en Brasil por la 10 del legendario Pelé.

"Mi padre hizo su carrera en la Holanda de los años 70, donde la vida cambiaba un poco", afirma Jordi a ESPN. "El hippie, las cadenas de oro, melenas largas y todo aquello; era un momento distinto, y mi padre estaba al frente de todo. Su filosofía era entretener, lo veía no sólo como cuestión de 'ganar’ o 'perder’, sino también como un divertimento".

"Él poseía un gran poder de convencimiento, y un carisma seguido por la gente. Era un rebelde para la Junta Directiva. Él diría lo contrario, pero era un verdadero dolor de cabeza para ellos. No creo que tenía muchos amigos [a nivel ejecutivo dentro del club]; sin embargo, defendió sus principios, siempre a favor de la seguridad de los jugadores".

Vistiendo la camiseta de la selección de Holanda, Cruyff también confrontó al establecimiento, ayudando a introducir los seguros de jugadores y derechos de imagen: Adidas le fabricó una camiseta especial para el Mundial de 1974, con dos rayas en vez del diseño característico de tres bandas de la marca, debido a su contrato con la rival Puma.

"Era una especie de James Dean del fútbol en esa época, tú sabes", afirmó Arsene Wenger, exdirector técnico del Arsenal, en 2017. "Le vi en Estrasburgo una hora antes del pitazo inicial, comiéndose un sándwich, para después saltar a la cancha y ser figura del partido. Él era esa especie de expresión de libertad, en la forma cómo se comportaba".

Cruyff trasladó ese espíritu de libertad a su carrera como entrenador. Cuando regresó al Ajax en condición de entrenador en 1984, él no contaba con las certificaciones necesarias para asumir formalmente el puesto; por ende, Cruyff creó el cargo de "director técnico" para eludir las normas. Luego del fallecimiento de Cruyff en 2016, el Ajax rebautizó su estadio como "Arena Johan Cruyff" a pesar de su complicada relación con el club de su niñez.

Cuando Cruyff dejó el Ajax por primera vez en 1973, el club holandés acordó su venta al Real Madrid. El jugador se negó a la transferencia y decidió fichar por el Barcelona: el mensaje era que él controlaba su destino y no un club. En 2010, Cruyff publicó un fuerte artículo en el diario holandés De Telegraaf, criticando al Ajax tras haber perdido 2-0 con el Madrid. Su ensayo fue el punto de partida de la "Revolución de Terciopelo" del Ajax, por la que Cruyff y algunos otros exjugadores volvieron al club, derrocando a los responsables del fiasco entre promesas de un regreso a la cúspide del balompié europeo. El propio Cruyff se concentró en renovar la cantera del Ajax, conocida como "De Toekomst" ("El Futuro" en holandés).

"Johan molestó a algunas personas; creo que esa era su vida", expresó Edwin van der Sar, CEO del Ajax, a ESPN. "Era muy franco. Ejercía gran influencia en 2010 y así fue como comenzó a ponerse énfasis en jugadores mejores y más jóvenes".

Su legado en el Barça: 'Al Barcelona le falta el ADN Cruyff'

"Cruyff es la persona más importante dentro de los éxitos del FC Barcelona, sin duda alguna", afirmó a ESPN Xavi Hernández, leyenda del club blaugrana.

"Creo que Johan no se sentiría contento con lo que ha sucedido allí en los últimos años: demasiados fichajes, demasiado dinero invertido y pocos canteranos haciendo grado", expresó De Boer, quien vistió las camisetas del Ajax y el Barcelona en la temporada 1999-2000. "La cantera debería estar más involucrada. Al Barcelona le falta el ADN Cruyff".

El legendario holandés asumió el mando del banquillo barcelonista en 1988 y en ocho años en el cargo, supervisó una era de éxitos sin precedentes: los culés alzaron cuatro títulos consecutivos de La Liga de España al inicio de la década de 1990 y la Champions League en 1992.

El plantel barcelonista que Cruyff heredó en 1998 era un desastre, similar al estado del Barcelona de 2021. La institución estaba inmersa en deudas, los índices de asistencia disminuían, habían ganado apenas un título de liga desde 1974 y los jugadores estaban peleados con el entonces presidente del club Josep Lluis Núñez. Cuando Cruyff se hizo cargo del equipo, todos los jugadores fueron despedidos con la excepción de 10. Sus lugares fueron asumidos por un grupo de futbolistas que ayudaron a darle forma al Barcelona dentro y fuera de la cancha durante los próximos 30 años: entre ellos se encontraban Ernesto Valverde (quien se convertiría en dos veces campeón de liga como entrenador del Barça), Txiki Begiristain (quien actualmente ayuda a forjar la era dominante del Manchester City) y Eusebio. En 1989, Cruyff contrató a Ronald Koeman (actual técnico del Barcelona) y le cambió de posición, pasando de ser volante defensivo a central. Un año después, ascendió a Guardiola al primer equipo.

La promoción de Guardiola personificó el maremoto radical que Cruyff había instigado dentro del Barcelona. Con los técnicos anteriores, lo más probable habría sido que Guardiola hubiese quedado relegado, al no llegar a la estatura mínima requerida de 1.80m. Cruyff se burló de esos dogmas, argumentando que un jugador más pequeño y con aptitudes técnicas podía ser tan efectivo como sus colegas de mayor contextura física. La cantera barcelonista de La Masía fue remozada a finales de la década de 1970, con un nuevo objetivo de reclutar jóvenes futbolistas que vivían cerca de la Ciudad Condal; y dicha filosofía dio frutos al mando de Cruyff.

"Cuando llegó al Barcelona, todos los equipos juveniles del club empezaron a jugar de forma similar al plantel absoluto; por ello, cuando llegamos al primer plantel ya estábamos acostumbrados a su estilo y era mucho más fácil jugar para él", afirma a ESPN Óscar García, graduado de la cantera que llegó al primer equipo en 1993.

Luego de que otros entrenadores asumieron el mando del club después de Cruyff, Guardiola fue designado como técnico del Equipo B en 2007 y llegó al plantel absoluto en 2008. Al igual que Cruyff en 1998, Guardiola limpió casa en el Barcelona, dándole un espaldarazo al talento proveniente de La Masía: su plantel se basó en los canteranos Xavi, Carles Puyol, Pedro, Sergio Busquets, Gerard Piqué, Víctor Valdés, Andrés Iniesta y Messi. El club disfrutó de éxitos increíbles, ganando tres títulos de liga consecutivos, incluyendo su histórico triplete de 2009 que les coronó como protagonistas de la segunda era de "Equipos Soñados" del club blaugrana.

"Cruyff ha ejercido la mayor influencia en la táctica futbolística tal como la conocemos hoy en día", indicó a ESPN John van’t Schip, actual seleccionador de Grecia y exjugador del Ajax. El técnico señala varias opciones tácticas de Cruyff y las cataloga como adelantadas a su tiempo: la utilización de Stanley Menzo como 'portero líbero’ en el Ajax; la forma cómo desplegaba extremos intercambiables para permitirles incursionar más adentro o quedarse por las bandas para centrar con su pie más fuerte. Van’t Schip sostiene que el "gegenpressing", sistema utilizado por Jurgen Klopp y Ralf Rangnick, tiene similitudes con el estilo del "Fútbol Total" de 1974, ya que aquel equipo holandés presionaba incansablemente a sus rivales hasta que cedieran el balón.

"Probablemente no es coincidencia que tantos futbolistas que jugaron al mando de mi padre se hicieron entrenadores. Tiene muchos discípulos [en la dirección técnica]", afirma Jordi. "Ellos tienen criterios futbolísticos propios (no copian a mi padre); sin embargo, encontraron inspiración en muchas de las ideas de mi padre. Siguen su propio camino, pero todos comparten el mismo lenguaje de la filosofía futbolística de mi padre".

"A mi criterio, Guardiola fue el discípulo más destacado de Cruyff", afirma Van’t Schip.

"Sin él, yo no estaría aquí", expresó Guardiola en 2016. "Sé con certeza que esa es la razón por la cual soy, en este momento, entrenador del Manchester City y antes de ello, laboré en el Bayern Múnich y el Barcelona. Antes de su llegada, no teníamos una catedral del fútbol, esta hermosa iglesia, en el Barcelona. Necesitábamos algo nuevo. Y ahora, es algo que ha perdurado en el tiempo. Fue construida por un hombre, por Johan Cruyff, piedra por piedra. Por eso, él era especial".

Los tres candidatos que compitieron en 2021 por la presidencia del Barça (Joan Laporta, Víctor Font y Toni Freixa) tuvieron como prioridad de sus programas electorales la renovación de La Masía. Ahora que Laporta, ganador de los comicios, inicia su segundo ciclo al mando del club, Cruyff es evidente parte central de la visión del ejecutivo. "Cruyff fue un genio. Me identifico totalmente con su forma de ver al fútbol y le tendremos presente en nuestros pensamientos a la hora de tomar decisiones", afirmó Laporta en enero de 2021. "Dedicaré todos los partidos que juguemos de forma espectacular a su memoria, como a él le gustaba jugar".

Sin embargo, una cosa es rendir tributo verbal a Cruyff y otra completamente distinta es aplicar sus ideas.

"Si quieres impresionar a alguien, dices: 'aplicaremos el estilo Johan Cruyff de jugar al fútbol’", expresa De Boer. "Era todo sol, la forma en la que jugaban al futbol. Pero se trata de una forma política y tácticamente astuta de utilizar su nombre".

El futuro: 'Johan, esto es de todos, no sólo de nosotros'

Quizás la encarnación más fiel de los valores de Cruyff, cinco años después de su fallecimiento, se encuentra en su Instituto y su Fundación. Jordi afirma que la Fundación Cruyff era como un hijo más para su difunto padre y que la inspiración para fundar ambas organizaciones provino de las experiencias vividas por Johan. El jugador nunca terminó sus estudios, pero se empeñó en evitar que sus hijos y otros no tomaran esa misma decisión.

"Incluso, llegó a sacarme del fútbol por un mes, cuando yo tenía 15 o 16 años, y no me permitió volver hasta que mejorara en los estudios", recuerda Jordi. "Yo era canterano del Barcelona en aquel entonces, y le dije: '¿por qué me exiges en los estudios cuando tú no lo hiciste?’ Me respondió: 'No se trata de lo que yo hice, tú necesitas estás preparado cuando llegue el día después del fútbol".

El Instituto cuenta con cinco centros de posgrado en todo el mundo, junto con tres academias y dos colegios. La Fundación, que ha ayudado a miles de niños gracias al deporte, fue producto de la creencia de Johan de que el deporte puede ayudar a sanar a la sociedad. Jordi recuerda cuando, durante su paso por los Estados Unidos, vivían al lado de un niño llamado John-John, quien tenía síndrome de Down. John-John quería jugar al fútbol con los otros niños de su calle, pero siempre quedaba relegado. Por ello, Johan empezó a "entrenar en la calle, sólo con John-John", recuerda Jordi. "Cuando regresó de jugar dos partidos como visitante, vio como los otros niños ahora jugaban al fútbol con John-John. Después de ello, él creó la Fundación".

"Muchas cosas siempre tienen su origen en acontecimientos de su propia vida, y él hacía las cosas porque había algo similar a una cicatriz, escondida en él ... algo que había causado impacto y él reaccionaba a ello".

Cruyff Football (otra rama del ente "World of Johan Cruyff" que agrupa dichas instituciones) se concentra en impartir sus métodos futbolísticos y es dirigida por el ex entrenador de La Masía Albert Capellas. También se encuentra el Volendam (el equipo de segunda división holandesa del que se hicieron cargo los ex jugadores del Ajax Wim Jonk y Ruben Jongkind en abril de 2019) que sigue viviendo y respirando la filosofía de Cruyff sobre la vida, la sociedad y el balompié.

Jongkind es uno de los discípulos más dogmáticos de Cruyff, y quien fue cercano a Johan hasta su fallecimiento a principios de 2016, producto de un cáncer de pulmón que hizo metástasis en el cerebro.

"Pocas semanas antes de morir, él me dijo: 'Muy bien, si no quieren [el Plan Cruyff] en el Ajax, lo querrán en otra parte’", recuerda Jongkind. "Creo que él habría dicho: 'Pues bien, haremos lo que hicimos en el Ajax, e incluso mejor, sin resistencia en el Barcelona y La Masía. Crearemos una Masía 2.0’. El quería traer de vuelta la cultura y energía catalanas al Barcelona".

El legado de Cruyff sigue impregnando el mundo del fútbol y se mantiene vigente, siendo la filosofía y cultura que los hinchas del Barça siguen añorando.

"Muchos jugadores que estuvieron en sus tablas, sus manos, su mente, en su pasión ... actualmente, la mayoría son entrenadores", dijo Guardiola. "Y su homenaje ... nunca podremos retribuir lo que hizo por nosotros. Jamás".