En caso que no se cumpla con el protocolo discriminatorio, la sanción comienza con una multa y dos años de suspensión, según el grado de la falta
Los organizadores de los partidos de la Selección Mexicana en Estados Unidos podrían ser sancionados hasta por dos años, en caso de que los aficionados pongan en práctica el grito homofóbico o cualquier otra expresión racista y no se realice ningún protocolo antidiscriminatorio. La penalización no es directamente para el Tricolor.
Desde mayo del 2022, la US Soccer Federation puso en marcha la “Política 521 - 2”, la cual fue ratificada en la asamblea de esa federación en el 2023. En un documento que fue consultado por ESPN se detalla que los “organizadores”, “promotores” o “agentes” que realicen partidos en los Estados Unidos y no cumplan con los “protocolos discriminatorios”, serán sancionados con una multa y con dos años de suspensión, en primera instancia, según el grado de la falta.
La Federación Mexicana de Futbol no es un agente, organizador o promotor de sus partidos en Estados Unidos, sino que estos se hacen por medio de una empresa.
En el caso del juego contra el equipo de las Barras y las Estrellas, del próximo 19 de abril, es organizado por la por US Soccer Federation y, de acuerdo a fuentes consultadas por este medio, desde hace tres semanas se ha trabajado de la mano de la Federación Mexicana de Futbol para delinear los protocolos discriminatorios y evitar alguna sanción.
“Si se producen cánticos discriminatorios en el partido internacional y el promotor no ha aplicado plenamente los protocolos para detener el cántico discriminatorio, el promotor/agente del partido de la FIFA perderá la fianza de cumplimiento como daños y perjuicios. US Soccer utilizará los daños liquidados para promover las iniciativas DEIB aprobadas y los derechos de las víctimas”, se lee en la “Política 521-2”, que fue revisada por este medio.
El protocolo contra los actos de discriminación se pone en marcha con una llamada de atención para los aficionados que estén realizando la falta. En caso de persistir la conducta, se detiene el partido unos minutos y, si continúa la acción, se suspende el juego de forma definitiva.
La US Soccer Federation y la FMF trabajan de la mano para evitar que continúe el grito discriminatorio en los partidos de la Selección Mexicana.