Peñarol le ganó 1 a 0 a Fénix este martes en el Parque Capurro por la fecha 13 del Torneo Clausura del Campeonato Uruguayo. El aurinegro siguió sin jugar bien, pero consiguió una victoria clave a esta altura del certamen.
El primer tiempo del partido fue pobre, con escaso juego asociado y con las ocasiones más claras creadas a partir de remates lejanos. Diego Aguirre hizo un cambio táctico a los 36’, sacando a Bruno Betancor para darle ingreso al “Cepillo” González, demostrando que el DT no estaba conforme con lo que estaba viendo en cancha.
Fénix también tuvo muchos problemas para elaborar en ofensiva, casi sin lograr incomodar al arquero Guillermo De Amores hasta el segundo tiempo.
En los segundos 45’, fue Peñarol el que pudo abrir el marcador, mucho más a fuerza de empuje que de juego. En una jugada algo confusa, donde un cabezazo hacia atrás de Diego Arismendi habilitó a Matías Arezo, el delantero aurinegro remató por arriba del golero y puso el 1-0 para la visita.
El gol modificó el panorama del partido, ya que el Ave debió salir a buscar el resultado, y se volcó con mayor agresividad hacia adelante. En ese sentido, logró crear varias chances donde De Amores debió intervenir, porque la zaga aurinegra no ofrecía la resistencia adecuada y dejaba huecos.
El paso de los minutos y los cambios realizados por ambos equipos dejaron servido un último cuarto de partido donde el protagonismo lo tuvo todo Fénix. Peñarol no podía mantener la posesión, ni tampoco contragolpear con claridad, mientras que los dueños de casa hacían llover pelotas sobre el área del Carbonero para intentar el empate.
Finalmente, el marcador no se movió y el Carbonero celebró una victoria importantísima para volver a pasarle la presión a Liverpool y romper una racha negativa de cinco partidos sin triunfos.