PARÍS (Enviado especial) - Eran las 22:10 en París y Los Pumas 7's continuaban asimilando la derrota a un costado del campo de juego. El seleccionado argentino no pudo ante Francia y cayó por 26-14, lo que lo imposibilita de luchar por una medalla en los Juegos Olímpicos de París 2024.
El conjunto dirigido por Santiago Gómez Cora, tras el cierre del encuentro con el try de Antoine Dupont, no ocultó la desolación por la eliminación en los cruces por el Oro. Lágrimas, abrazos emotivos y gestos de dolor en un plantel que soñó cuatro años con este certamen.
Tras varios minutos de finalizado el encuentro ante los locales, Los Pumas 7's permanecieron en el túnel del Stade de France. Los integrantes del seleccionado argentino, algunos con sus brazos en la cabeza, como Santiago Mare y Matteo Graziano, y otros flexionando el cuerpo hacia abajo de tristeza, tal fue el caso de Matías Osadczuk.
Instantes después, Graziano quedó en soledad apoyado en una pared al costado del campo de juego, hasta que luego se sumaron a su lado Mare y Joaquín Pellandini: los tres permanecieron por unos segundos en silencio, mirando el horizonte.
Pero, como se acostumbraron durante los dos primeros días de competencia, apareció el grito argentino: los hinchas albicelestes, que en su gran mayoría se encontraban en la tribuna del sector de enfrente, comenzaron a alentar a los comandados por Gómez Cora, quienes automáticamente respondieron. El propio Pellandini alzó su brazo derecho y acompañó el reconocido cántico de: 'Soy argentino, es un sentimiento, no puedo parar'.
Finalmente, fue el turno de juntarse y llevar a cabo la ronda característica luego de cada encuentro. La historia de la caída ante Francia finalizó con un abrazo entre Gastón Revol y el propio Graziano, 15 minutos después del cierre ante Francia, quien permaneció en soledad de brazos cruzados observando lo que ocurría con uno de los otros cruces de cuartos de final: Fiji-Irlanda.