A principios de febrero Dominic Thiem hablaba de 2024 como su “última oportunidad” para volver al alto nivel. En una crisis de confianza y de resultados, el exTop 3 contaba con el mes de marzo para recuperarla en el circuito Challenger pero sin resultado alguno.
Eliminado en primera ronda en Szekesfehervar por Daniel Michalski, 295º del mundo, viajó a Croacia para disputar el torneo de Zadar y pudo festejar (ante Filip Krajinovic). Sin embargo, al segundo match cayó con un 6-2 y 6-1 contundente para su compatriota Lukas Neumayer, modesto 219º. La posterior baja de Nápoles sembró las dudas.
Para despejarlas, el campeón del US Open 2020, grabó un video de Instagram donde confirma que todavía siente algunos dolores en la muñeca operada en 2021 pero no se baja de la pelea. Bajó las cargas para estar mejor y regresar a Estoril a principios de abril.
"Hola a todos. Quería darles un mensaje a todos, sobre todo después de los rumores que han existido en los últimos días, y quería que fuese a través de mis redes sociales, para que todos puedan conocer la verdad. Empecé a tener esos 'clicks' de nuevo, que me molestaban muchísimo, y que se asemejaban a los que sentí cuando regresé de mi lesión, hace tres años. Además, esa 'extraña sensación' regresó y se convirtió en dolor en las últimas semanas", sentenció.
En lo que va de 2024, el exnúmero 3 del mundo además fue eliminado en primera ronda del ATP 250 de Brisbane, tras superar la qualy, y del Abierto de Australia. Su único triunfo en los primeros dos meses del año se dio en la Copa Davis, representando a su país ante el irlandés Michael Agwi, quien no estaba clasificado dentro de los 900 mejores jugadores del mundo.