Novak Djokovic (6° de la ATP) continúa dando de qué hablar a sus 38 años. A pesar de todos sus logros y conquistas en el circuito, partido a partido encuentra la manera de robarse todos los flashes.
En su partido frente a su compatriota Miomir Kecmanovic (49°), el exnúmero 1 jugaba no solo por el pase a los octavos de final sino que también para asegurar su victoria número 100 en Wimbledon.
De todos modos, se quedó con todas las miradas por otra cuestión: un verdadero puntazo. Si hay una cuestión que nunca dejó de sorprender a lo lago de todos estos años es su elasticidad y esta vez no fue la excepción.
Todo comenzó con una subida a la red, con un drop incluido para que Kecmanovic también avance en la cancha. A partir de ahí, con ambos jugadores situados muy cerca de la parte central del court, hubo un lindo intercambio de golpes que concluyeron con un globo de Nole.
Posteriormente, aprovechando que su ejecución había obligado a su rival a retroceder, Djokovic jugó nuevamente una pelota corta para atraerlo de nuevo a la red. ¿Cómo terminó la jugada? Con una excelsa volea que se robó una larga ovación en el All England.
El exnúmero 1 del mundo mostró todo su repertorio frente a Kecmanovic.
Más allá de llevarse los aplausos, dicho punto no fue uno más sino que sirvió para destrabar un partido que estaba muy equilibrado. Al finalizar ese game, pudo quebrar y, de este modo, servir para cerrar un set importante.
Toda la actividad de Wimbledon puede seguirse en VIVO por Disney+.