Cuando ingresaron al estadio central de Shanghai Novak Djokovic (5° del ranking mundial) y Valentin Vacherot (204°), todo era sonrisas. Nada hacía presagiar el clima de tensión y de incertidumbre que generaron los evidentes gestos de dolor del serbio a los pocos minutos de comenzar el match.
El tetracampeón del torneo se enfrentó a un semifinalista debutante por primera vez como serio candidato y, en un abrir y cerrar de ojos, se convirtió en retador.
"Parece que siempre ocurre algo con mi cuerpo en cada partido", había dicho en la última conferencia de prensa quien arrastraba problemas en el tobillo derecho, aductor izquierdo y hombro derecho. Ahora empezó a molestarse con algo que parecía ser muy difícil de controlar: la parte alta del glúteo izquierdo.
No tardó en llegar la asistencia médica con analgésicos y masajes que tardaron en hacer efecto. Ceder el servicio para el 5-3 pintaba ser lo último del serbio en cancha. Pelotazo a la lona con signos de dolor y el recuerdo de la descalificación en el US Open 2020 se hicieron presente.
Pero aguantó. El primer set se le escurrió de las manos porque el monegasco nunca se desenfocó: 6-3.
Es recurrente la cuestión climática de calor abrumador en sus contactos con la prensa y este duro compromiso no fue la excepción: "Las condiciones son muy complicadas para todos los jugadores estos días. He intentado sobrevivir y me enorgullece haber superado esta barrera".
En la otra semifinal del torneo chino están el ruso Daniil Medvedev (18°) y el francés Arthur Rinderknech (54°).
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