BOSTON -- Ian Kinsler ha estado aquí dos veces antes y en ambas quedó corto con su equipo.
El segunda base de los Boston Red Sox fue parte de los Texas Rangers que perdieron dos Series Mundiales, en 2010 y 2011, y ahora espera que la tercera oportunidad de coronarse en las Grandes Ligas sea la vencida.
“Honestamente, nunca pensé que tuviera una tercera oportunidad“, dijo Kinsler este lunes. “Nunca esperas llegar a una Serie Mundial, menos tres veces. Peleas, compites por esto, pero es algo bien difícil de cumplir, das tu mejor esfuerzo y si llegas lo aprecias, porque nunca sabes si se repetirá“.
Kinsler tendrá su tercera oportunidad a partir de este martes, cuando junto con sus Red Sox enfrenten a Los Angeles Dodgers que jugarán el Clásico de Otoño por segunda vez al hilo, como le sucedió a él hace siete años.
La primera ocasión, Kinsler perdió en cinco partidos ante los San Francisco Giants, que eran claros favoritos contra unos entonces sorprendentes Rangers, y la segunda contra los Arizona Cardinals, a pesar de que su equipo era el favorito y que en dos ocasiones, en las entradas nueve y 10 se quedaron a un out de ser campeones por vez primera en la historia de la franquicia.
“Aprendí que el béisbol es frágil, todo pasa rápido“, reconoció el pelotero de 36 años. “Todo puede pasar hasta que no pasan los 27 outs y quizá más...“.
Kinsler debutó en las Grandes Ligas en el juego inaugural del 2006 como el principal prospecto en aquella época de unos jóvenes Rangers y, de manera irónica, fue contra los Red Sox, a quienes conectó su primer imparable.
A partir de ahí se convirtió en una de las figuras de Texas durante ocho temporadas, antes de salir en canje hacia los Detroit Tigers, donde estuvo cuatro años y medio. Esta campaña firmó como agente libre con Los Angeles Angels, que lo canjearon en julio a los Red Sox.
“Desde que llegó ha sido un jugador positivo que nos ha ayudado a solidificar nuestra defensa“, dijo el manager de los Red Sox, Alex Cora, la semana pasada. “Es un veterano con experiencia, que sabe lo complicado que es llegar hasta acá“.
Kinsler reconoció el trabajo de los Dodgers, que llegan por segundo año consecutivo, luego de perder en el 2017 en siete partidos contra los Houston Astros.
“Nunca es fácil recorrer todo el camino en temporada regular y luego en la postemporada alcanzar la Serie Mundial“, dijo. “Jugar dos Series Mundiales consecutivas es algo bien difícil de cumplir. En cualquier deporte lograr dos campeonatos consecutivos es algo casi imposible, por la dificultad de mantenerse en el más alto nivel competitivo por dos años completos“.
“Una vez que llegas todos los equipos te persiguen, te conocen mejor y van por ti“, agregó. “Hay más información tuya que de los demás equipos. Lo que Dodgers logró es bien duro“.
El primera base de Boston Mitch Moreland también está consciente de la complejidad de llegar a la serie final después de 162 partidos de temporada regular y dos series de playoffs previas. Fue compañero de Kinsler en el 2010 y 2011 en los Rangers, con los que además fue a playoffs en 2012, 2015 y 2016.
“Tuvimos grandes equipos“, recordó Moreland. “Pensé que podríamos hacer la carrera de nuevo. Llegamos a la postemporada al año siguiente y un par más de años, pero quedamos cortos“.
Kinsler dijo que ninguno de sus actuales compañeros se había acercado aún para pedir consejo o preguntar sobre la experiencia de Serie Mundial, que todos están enfocados en el presente y distan de pensar en el pasado, y que está motivado como nunca para tratar de conseguir el anillo de campeón que corone hasta el momento sus 12 temporadas ligamayoritas.
“Es lo que nosotros hacemos, es nuestro trabajo estar listos, jugar béisbol“, dijo Kinsler. “Todos sabemos que es un periodo largo, un gran maratón por el que tienes que ir de 162 partidos. Nada importa lo que hiciste el año previo“.
“Estos atletas están entrenados para tener memoria corta, seguir adelante y estar listos para el siguiente partido. Honestamente no es tan difícil. Hablas de esto con algunos pero rápido tienes que estar listo para seguir adelante con las metas de la organización, personales y de los aficionados“.