Pase lo que pase este domingo, la Serie Mundial regresará a Los Ángeles para al menos un juego más.
Dodgers de Los Ángeles fabricaron un racimo de cinco carreras en el noveno episodio para romper un bonito duelo de pitchers y llevarse el triunfo 6-2, para empatar con los Astros de Houston a dos victorias por bando.
El zurdo Alex Wood lanzó el juego de su vida, al mantener a los Astros sin hits por cinco entradas y dos tercios, hasta que George Springer rompió la magia con bambinazo, mientras que su rival Charlie Morton mantenía en cero a los Dodgers por seis y un tercio.
Esta fue la tercera vez en la historia en que los abridores de ambos conjuntos se combinan para permitir un hit o menos por los primeros cinco episodios.
Las veces anteriores fueron en el cuarto juego de la serie del 1906 entre los dos equipos de Chicago y el quinto partido de 1956, entre los Dodgers ylos Yankees de Nueva York, que terminó Don Larsen con labor perfecta.
Esta vez le salieron bien las cosas con el pitcheo al manager Dave Roberts, quien le pidió la pelota a Wood después del jonrón de Springer, cuando ya sumaba 84 lanzamientos.
Brandon Morrow (1.1) y Tony Watson (una entrada) le prepararon el camino al cerrador Kenley Jansen, quien retiró el noveno a pesar de tolerar cuadrangular de Alex Bregman.
Clave en el triunfo de los Dodgers fue la rareza de ver al venezolano José Altuve irse en blanco en cuatro turnos.
De hecho, salvo los bambinazos de Springer y Bregman, el resto de la alineación se fue de 20-0, para propinarle a los Astros su primera derrota en casa en la postemporada completa.
La mejor noticia para Roberts fue el despertar de su cuarto bate, el novato Cody Bellinger, quien llevaba 12 turnos en blanco en este clásico de otoño, hasta que disparó dos dobletes en sus dos últimos turnos, que resultaron fundamentales en la victoria de su equipo.
Con el primer biangular, en la alta del séptimo, inició una rebelión ante el abridor Morton, que propició el empate 1-1.
Esta vez fue el manager de Houston, A.J. Hinch, quien quizás se apresuró al acudir al bullpen, pues sacó a Morton después del doblete de Bellinger con sólo 76 envíos.
Will Harris, quien vino en su rescate, no pudo hacer el trabajo y permitió sencillo de Logan Forsythe que remolcó a Bellinger e igualó las acciones.
Antes del imparable de Forsythe, los Dodgers llevaban de 17-1 con hombres en posición anotadora en la serie.
Como también falló el cerrador Ken Giles en el noveno, para tratar de mantener empatado el marcador y darle a su equipo la posibilidad de dejar al campo a los Dodgers en el cierre del noveno.
Giles se fue sin sacar outs, después de permitir un sencillo, regalar un boleto y soportar el segundo doblete del juego del novato Bellinger, que le dio ventaja a Los Ángeles.
El remedio fue peor que la enfermedad y Joe Musgrove, su sustituto, terminó aceptando bambinazo de Joc Pederson par a redondear el racimo de cinco.
Otra vez tenemos serie nueva, esta de tres juegos a ganar dos, con ventaja de localía ahora para los Dodgers, que tendrán al menos uno y quizás un decisivo séptimo partido en su casa de Chavez Ravine.