Sandy Ryan insiste en que las provocaciones y los comentarios de Mikaela Mayer no la perturbarán en la preparación para la revancha del sábado.

Sandy Ryan insiste en que las provocaciones y los insultos de Mikaela Mayer no la perturbarán esta semana, de cara a la revancha del sábado.

La retadora inglesa confía en que no se repetirá un incidente previo al combate como el de su última pelea contra Mayer en el Madison Square Garden en septiembre de 2024. Alguien le arrojó pintura a Ryan cuando salía del hotel para dirigirse a la sede del combate y enfrentarse a Mayer, quien posteriormente ganó el título mundial wélter de la OMB por decisión mayoritaria.

Ryan (7-2-1, 3 KOs), de 31 años y originaria de Derby, culpó a un miembro anónimo del equipo de la estadounidense Mayer por la agresión. Mayer (20-2, 5 KOs), de 34 años y originaria de Colorado, ha negado cualquier implicación de su equipo en el incidente. Ryan se ha preparado en Las Vegas con Kay Koroma, exentrenadora de Mayer, y esta semana tendrá a su hermano Dave, exboxeador profesional, a su lado en la previa de la pelea en Fontainebleau, Las Vegas.

"No me sorprendería que ella aportara más, pero esta vez estamos preparados", declaró Ryan a ESPN.

"Creo que le gusta provocar e inquietar a los oponentes. Sabe lo que puedo hacer y, para ser justos, todas sus payasadas previas a la pelea funcionaron la última vez, pero no volverán a funcionar.

"Con eso (el ataque con pintura) ocurrido tres horas antes de la pelea el año pasado, creo que me afectó y luché emocionalmente, luché con ira, y afectó mi desempeño.

"Que intenten lo que quieran. Mi mánager se encarga de la seguridad, así que todo se resolverá y tengo a mi hermano mayor (Dave) a mi lado. Esta vez tendré más gente aquí.

"No voy a culpar a quién hizo qué. Es obvio. Dejaré que la gente decida, que se forme su propia opinión al respecto.

Ryan y Mayer se enfrentarán en una de las peleas femeninas más importantes del año debido a su intensa rivalidad, que continuará más allá del sábado si Ryan se venga.

"Su rivalidad ha puesto al boxeo femenino en una gran plataforma, para encabezar un evento estelar en Las Vegas, pero quizás tenga que subir al escenario con mis auriculares puestos para no tener que escucharla", dijo Ryan a ESPN.

"Le encanta hablar mal de ella, y espero que lo haga; no puede evitarlo.

"Si derroto a Mayer esta vez, pelearé con ella por tercera vez aquí (EE. UU.) porque hay una cláusula de revancha".