FOXBOROUGH, Mass. -- Si los New England Patriots hicieran un intento al final de la temporada y Tom Brady persuadiera a Rob Gronkowski a dejar el retiro, ¿el ala cerrada aceptaría?
“No. No diría que aceptaría”, respondió Gronkowski en The Adam Schefter Podcast. “Realmente estoy disfrutando mi tiempo libre, disfrutando lo que he encontrado al entrar al mundo de los negocios. Tengo muchos pendientes en las próximas dos semanas, con mis hermanos y la familia. Realmente me mantengo ocupado con eso”.
Gronkowski, quien promueve el uso de productos CBD, hizo una emotiva aparición la semana pasada en New York cuando dijo, “No estaba en un buen lugar. El futbol americano me estaba consumiendo y no me gustó. Estaba perdiendo la alegría en la vida”.
También dijo a HBO que primero consideró retirarse en el campamento de entrenamiento de 2017.
“Entonces, intentaba salir a las prácticas en el verano y me arrollaba cada novato”, dijo Gronkowski.
En el podcast de Schefter, Gronkowski rió mucho y dijo no tener dudas de que, físicamente, podría volver a jugar otra vez, pero que mentalmente no está en el punto donde debería para hacerlo.
“Verdaderamente tengo ese deseo. Siento que dicen mi nombre y que hay pasión dentro de mí y una consistente. Es en ese momento cuando pienso en volver”, señaló el ex ala cerrada a Schefter.
Los Patriots mantuvieron sólo a dos alas cerradas en su roster inicial de 53 rosters, el veterano de cuarto año Matt LaCosse y la selección colegial de séptima ronda en 2018, Ryan Izzo.