En algún momento de cada temporada de la NFL, inevitablemente acabo haciendo referencia a la paridad de la mejor liga del mundo. En esta no será la excepción.
Las sorpresas son una constante en cada temporada y en esta Semana 10 se presentaron algunas que además acaban sembrando dudas en algunos equipos que creíamos estaban en camino directo hacia la postemporada.
Incluso durante la ausencia de Drew Brees, los Saints no dieron muestras de debilidad y llegaron a enfrentar en esta jornada a un débil rival de división como son los Atlanta Falcons, que llegaron con record inverso al de los Saints, es decir 1-7
No hay explicación posible para que la ofensiva de los Saints anotará solo nueve puntos, como no sea la actuación de una desconocida línea ofensiva que permitió seis capturas de quarterback. Brees nunca pudo estar cómodo en la bolsa de protección.
Ni siquiera el regreso de su corredor Alvin Kamara pudo aportar para el equipo que muchos (me incluyo) es el mejor de la Conferencia Nacional.
Por otra parte, la defensiva de New Orleans se vio lenta desganada y jamás pudo parar a Matt Ryan.
Para esta semana, se esperaba con mucho interés el regreso de Pat Mahomes para comandar la ofensiva de los Chiefs.
Muchos pensábamos que incluso con el quarterback suplente, Matt Moore, Kansas City podría llevarse la victoria ante los Tennessee Titans.
No tuvo mala tarde Mahomes, ya que terminó con 446 yardas por aire y tres pases de touchdown, pero su defensiva sigue siendo el talón de Aquiles y si a ello le agregamos su muy malo equipo especialista que fallo un gol de campo que le habría dado la victoria. ¡Un desastre!
Hoy, uno de los equipos que era favorito para llegar al Super Bowl tiene marca de 5-4 y está a un juego de ser alcanzado en la división por los Oakland Raiders.
Seguramente se acuerdan del famoso "Super Bowl 53.5", partido que debió haberse jugado en México el año pasado. Para ese partido Kansas City jugaba contra los Rams. Era el encuentro entre dos equipazos. Hoy los dos son una sombra.
Los Rams, actuales campeones de la Conferencia Nacional no pudieron en cuatro cuartos anotar puntos. La defensiva anotó nueve puntos y los equipos especiales tres, para un total de 12 unidades.
Jared Goff recibió extensión de contrato este año, y además los Rams cuentan con Todd Gurley II y con uno de los mejores cuerpos de receptores de la liga.
A la defensiva están Aaron Donald, Dante Fowler Jr., Clay Matthews, Jalen Ramsey, uff bueno mucho talento y, aun así, acaban perdiendo ante unos Pittsburgh Steelers que tienen muchas limitaciones, aunque una muy respetable defensiva. Impresentables estos Rams, que no tienen nada que ver con la explosividad del año pasado.
De paso, con la victoria Pittsburgh acumula récord ganador y ha sumado cinco victorias en los últimos 6 juegos.
Levante la mano aquel que pensó al principio de la temporada que Carolina sería contendiente en la Conferencia Nacional.
Nadie, ¿verdad?
Sin embargo, la irrupción del desconocido Kyle Allen como quarterback substituyendo a Cam Newton fue lo mejor que pudo pasarles.
Allen le dio otra dimensión a unos Panthers que llegaron al Lambeau Field para enfrentar a los Green Bay Packers. La derrota que sufrió el equipo de Ron Rivera no me parece sorpresiva en sí, pero si los baja un escalón en cuanto a su potencial.
De cualquier manera, Carolina no está para pelearle la división a Saints, están solo para ir por un boleto como comodines, mismo que aún podrán pelear.
La derrota de los Bills ante los Cleveland Browns califica como sorpresa.
Cleveland no ha dado una en toda la temporada. Ha sido una de las más grandes decepciones del año. Su head coach, Freddie Kitchens, no tiene la personalidad ni experiencia para ser entrenador de futbol americano a este nivel.
Perder 19-16 con los Browns solo se explica si los Bills se confiaron o se levantaron del lado izquierdo de la cama. Pero que no cunda el pánico quizá la derrota es una llamada de atención a tiempo ya que non marca de 6-3 seguirán en posición de obtener su segundo viaje a la postemporada en los últimos tres años.
Ganar en noviembre y diciembre seguirá siendo decisivo para lograr llegar a la postemporada. Más vale que los equipos que la pretenden, lo tengan en mente.