Karina Tovar aprendió las reglas del futbol americano antes de hablar inglés. Hoy es la única referee latina de la NFL. Esta es su historia.
LOS ÁNGELES, Calif. – Karina Tovar aprendió las reglas del futbol americano antes de siquiera saber hablar inglés. Tovar, la hija de dos migrantes mexicanos, nació y creció en el sur de California, y sus padres le inculcaron primero el idioma de sus raíces antes de inscribirla a la escuela, donde aprendería a ser bilingüe.
A principios de la década de los noventa, Karina notaba un patrón cada fin de semana que terminaría por fijar el rumbo de su vida. Cada fin de semana, las caricaturas que ella veía por la mañana cedían su lugar en la televisión a un juego que, al principio, le provocaba curiosidad. A lo largo de los años, esa curiosidad se transformó en aprecio, y eventualmente, un amor que perdura.
“Para mí era casi como un tablero de ajedrez, un montón de entrenadores y atletas fenomenales simplemente jugando el juego al más alto nivel de atletismo”, dijo Tovar en entrevista exclusiva con ESPN. “Ahí es realmente donde comencé a disfrutar del futbol a una edad temprana”.
En aquel entonces, era difícil siquiera entretener la idea de que ese amor por el futbol americano pudiese terminar en una carrera concreta. La primera ejecutiva en la historia de la NFL fue Amy Trask, quien operó como la CEO de los entonces Oakland Raiders entre 1997 y 2013. La primera entrenadora en la historia de la liga llegó hace una década, cuando Jennifer Welter trabajó con los Arizona Cardinals durante la pretemporada.
Obviando que jamás ha habido una jugadora activa en la NFL, la única otra profesión que podría poner a una mujer sobre el campo de juego es de oficial de campo. En 2015, Sarah Thomas se convirtió en la primera mujer árbitra en la historia de la liga, abriendo las puertas de esta profesión para que otras pudieran seguir.
En 2024, Karina Tovar hizo historia en el deporte profesional: se convirtió en la primera árbitra con raíces latinas en la historia de la NFL, y apenas la quinta mujer en los 106 años que existe la liga. Actualmente, Tovar es apenas una de dos mujeres árbitras en activo, junto a Thomas.
Una latina rompiendo barreras
Para Karina, seguir el camino del arbitraje desde una temprana edad fue un acto de fe: sin garantía alguna de que pudiese ser una carrera a largo plazo, pero con toda la emoción que representaba estar sobre el campo de juego, un lugar que era familiar para ella, ya que desde niña, practicaba otros deportes.
“Era muy activa”, dijo Karina. “Mi hermano y yo siempre estábamos jugando con nuestros vecinos y me metí a practicar fútbol (soccer) y básquetbol. Mis padres siempre me animaban a probar aquello que me interesara y me animaban”, continuó.
Hija de Salvador y Carmen, él nacido en Zacatecas, y ella de Puebla, Karina creció con su hermano Salvador Jr. en la zona este de Los Ángeles, una ciudad que se destaca por tener una de las concentraciones más grandes de personas con raíces mexicanas. De acuerdo al censo de 2020, el 48% de la población total del condado de Los Ángeles se identifica como Hispana o Latina, de la cual la mayoría es de ascendencia mexicana.
El fútbol americano tiene, a lo largo de más de un siglo, varios grandes representantes de origen mexicano. Jugadores con ascendencia del país o nacidos ahí incluyen a jugadores como Tom Fears y Anthony Muñoz, ambos en el Salón de la Fama, o Raúl Allegre, quien fue dos veces campeón con los New York Giants. El entrenador Tom Flores deleitó a Los Ángeles cuando ganó el Super Bowl XVIII con los Raiders, mientras el equipo tenía a la ciudad como sede.
Pero en la casa de los Tovar, los primeros ídolos a los que Karina buscaba emular eran figuras de baloncesto como Kobe Bryant y Shaquille O’Neal, ambas estrellas en Los Ángeles cuando jugaban para los Lakers. Tras jugar basquetbol durante su adolescencia, Tovar ingresó a la universidad de Cal State-Northridge, donde comenzó a ser árbitra de baloncesto para partidos de preparatoria. Poco tiempo después, comenzó también con partidos de futbol americano al mismo nivel, dedicándose de pleno a este deporte.
“Yo le veía potencial, que le echaba el cien por ciento a los deportes y era muy dedicada”, dijo Salvador Tovar, padre de Karina, en entrevista para ESPN. “Pero no me esperaba que llegara a las grandes ligas, entonces fue una gran alegría”.
El futbol americano es uno de los deportes más populares para la gente joven en Estados Unidos. La NFL estima que hay más de un millón de jugadores a nivel high school, y 2.4 millones menores a 17 años que juegan flag football. Eso significa que, a través de los 50 estados, se requiere una cantidad notable de referees para dirigir estos partidos. Estos suelen comenzar como voluntarios, recibiendo pagos pequeños por sus participaciones.
A medida que arbitraba partidos a nivel preparatoria, Karina descubrió que su pasión por el deporte se podría transformar en un trabajo a tiempo completo. En el ínter, formó una familia, casándose y teniendo dos hijos. Para su familia, prescindir de su esposa o de su mamá los viernes por la noche o ahora, todo un fin de semana, se convirtió en una rutina.
“Cada partido (arbitrado por Karina) era como una salida en pareja”, dijo Randy del Cid, esposo de Karina, en entrevista con ESPN. “Es un reto, definitivamente. Nos comunicamos todo el tiempo, tenemos un calendario familiar para tomar en cuenta los viajes. Mis suegros nos ayudan mucho, y no podríamos hacerlo sin ellos, pero lo importante es siempre estar alineados con los calendarios”, continuó.
Los primeros años arbitrando partidos de preparatoria despertaron el interés de Karina de subir de nivel y arbitrar partidos a nivel universitario, o inclusive profesionales. Para eso, se requería una dedicación mayor asistiendo a campamentos especializados, así como llamar la atención a los administrativos y ex árbitros que monitorean dichos campamentos. Aún con todo eso, las posibilidades de llegar a la NFL eran ínfimas.
El futbol universitario, un paso clave hacia la NFL
Cada partido de la NFL promedia alrededor de 153 jugadas. De acuerdo a la liga, los oficiales de campo aciertan en 98.9% de las decisiones que toman. A lo largo de la historia de la liga, el número de oficiales ha ido incrementando para responder a la evolución atlética y física de la liga –comenzando con tres, hoy en día hay siete oficiales patrullando los campos cada día de partido.
Se estima que más de mil personas han trabajado como referees en la historia de la NFL. Actualmente, hay 121 en funciones entre 17 equipos. Estos grupos trabajan juntos de forma exclusiva durante todo el año, aunque pueden producirse cambios entre temporadas. Tovar forma parte del grupo de Clete Blakeman, un árbitro con 18 años de experiencia que trabaja de abogado en la temporada baja.
Karina se dedica de tiempo completo al arbitraje, como varios de sus compañeros, aunque otros, como Blakeman, tienen ocupaciones variadas a lo largo del año. Por ejemplo, al igual que Blakeman, hay una variedad de abogados y oficiales relacionados al campo legal en general. Scott Campbell y Dave Hackshaw son bomberos, y Greg Bradley es un ingeniero químico.
Cuatro oficiales -Courtney Brown, Mike Morton, Nate Jones y Terry Killens- son ex jugadores de NFL. Sin importar de cuales son sus vivencias o que hagan fuera del emparrillado, el proceso para que un oficial llegue al profesionalismo suele ser el mismo: arbitrar partidos a niveles inferiores, y asistir a campamentos liderados por ex oficiales quienes valoran el conocimiento y desempeño de aquellos que quieren llegar más lejos.
“Todos van a estas clínicas y están observando a todos, están viendo cómo la gente se desarrolla a lo largo del tiempo”, dijo Karina. “No esperan que lo sepas todo, esperan que recibas la retroalimentación y la apliques con rapidez”.
Tras sus primeros años de experiencia a nivel preparatoria, Tovar asistió a un campamento liderado por Gerry Austin, quien acumuló 26 años de experiencia en la NFL como árbitro, y quien trabajó en tres ediciones del Super Bowl durante su carrera, dos como el referee principal. A su retiro, Austin trabajó para ESPN como analista de reglas en Monday Night Football, y además trabajó como el jefe del arbitraje en la conferencia universitaria de Conference USA hasta 2021.
Durante el campamento en el que coincidieron, Tovar recibió una recomendación específica en lo que se refiere a los instructores: no cuestionar o debatir con ellos cuando les hagan una corrección. En una jugada de pase apretada, Karina notó que el balón cayó al suelo pese al esfuerzo del receptor, y marcó incompleto.
“(Austin) está parado justo detrás de mí y se me acerca frente a todos y me dice, ‘eso fue pase completo’, y yo estaba super asustada”, recordó Karina. “Yo juraba por mi vida que había visto que esa pelota golpeó el suelo y le dije, ‘señor, fue pase incompleto’. Creo que pasaron como 30 segundos y me dice, ‘solo estoy bromeando contigo’”, continuó.
Aquel episodio derivó en que Austin contratara a Tovar para Conference USA en 2019, lo que le abrió las puertas al mundo del futbol americano universitario. Años atrás, Austin también había contratado a Sarah Thomas a la misma conferencia, encarrilándola hacia la NFL. Durante su tiempo como oficial universitario, Karina amplió su experiencia como oficial en partidos de la Pac-12, y se convirtió en la primera mujer en arbitrar un duelo de la ACC en su historia.
En 2024, la UFL, una liga profesional que se formó gracias a la unión entre la XFL y la USFL, le otorgó a Karina su primer trabajo al máximo nivel. Fue ahí donde la NFL puso sus ojos sobre ella y le otorgó la oportunidad de hacer historia.
“Recibí una llamada de alguien de la oficina de arbitraje (de la NFL)”, recordó Karina. “Me preguntó que en qué necesitaba trabajar como oficial, y le contesté que aprenderme el reglamento de la NFL, todavía estaba trabajando con reglas universitarias en la UFL, y él me dijo, “bueno, será mejor que te aprendas el reglamento de la NFL, bienvenida".
México: la responsabilidad de la próxima generación
En marzo de este año, Tovar emprendió un viaje a Monterrey, México, para liderar un campamento por primera vez, luego de completar su primera temporada en la NFL. Para Karina, fue un momento especial que significó volver a la tierra de sus padres, y a compartir su historia de éxito con aquellos y aquellas que en algún momento quisieran seguir en sus pasos.
Pese a que tuvo que pasar casi un siglo de competencia en la NFL para que apenas la primera mujer pudiera pisar el campo como árbitra dentro del emparrillado, las puertas se están abriendo para que la diversidad de género siga siendo cada vez más común a lo largo de la liga en general.
Actualmente, 12 de las 32 franquicias de la NFL tienen una mujer como dueña en solitario o como socia. Cabe destacar, que hasta el 2001, apenas tres equipos habían tenido a una mujer como dueña: los Arizona Cardinals, Chicago Bears y Los Angeles Rams. Esta temporada se cumplen diez años desde que Welter debutó como la primera entrenadora en un equipo de NFL. En 2025, hay 15 en total. Una de ellas, Autumn Lockwood, ganó el Super Bowl el año pasado como parte de los Philadelphia Eagles.
Es decir, las pioneras de hoy están dejando firmemente el camino para las que estarán mañana. En el caso de Karina, esa motivación la llevó a Monterrey, con la intención de ser el puente para la siguiente generación.
“Fue una experiencia bastante increíble”, dijo Karina. “Puedes retribuir con facilidad porque vas a muchos de estos entrenamientos aquí en los Estados Unidos donde aprendes y luego regresas y devuelves y eso se cierra el ciclo, disfrutas enseñando lo que has aprendido”, continuó.
No son solamente los campamentos y la cercanía con los jóvenes que ahora la ven como inspiración que motiva a Tovar a estar cerca de México. Hoy, ya firme en su segunda temporada como árbitra, sigue habiendo un sueño que comparte toda la familia: un posible partido de la NFL en México.
El Estadio Azteca (ahora conocido como Banorte) ha sido sede de cinco partidos de temporada regular de la NFL entre 2005 y 2022. Actualmente, por renovaciones ligadas al Mundial de la FIFA en 2026, no ha existido la posibilidad de que el futbol americano vuelva a la Ciudad de México.
“Me gustaría (verla) en el Estadio Azteca, si le tocara trabajar allá, para Randy, su mamá y yo”, dijo Salvador.
Al mencionarle la misma posibilidad a Karina, la emoción es palpable. La idea de representar a su gente, de ambos lados de la frontera, en un partido de la NFL que se celebre en la tierra de sus ancestros, es algo que incluso hace unos años podría haber parecido totalmente imposible.
Para Karina, la reacción ante poder siquiera tener esa conversación es una de gratitud. El deporte del cual se enamoró, el que conoció sin antes saber hablar inglés, el que su familia abrazó con brazos abiertos y el que ahora le permite hacer historia, sigue siendo el vehículo para lograr cosas grandes en la vida.
“¿Sabes qué? Ha sido una bendición realmente el poder aprovechar la oportunidad de representar a mi comunidad”, dijo Karina. “Estoy tan orgullosa de mis padres, de lo que han sacrificado. Me hace querer trabajar más duro y poner más esfuerzo en ello y simplemente darme cuenta de que este es el sueño americano.
“El Estadio Azteca es un estadio famoso a nivel mundial y es fenomenal, así que creo que culturalmente sería un sueño hecho realidad. Obviamente, donde sea que la NFL me envíe a trabajar, allá iré, y estoy agradecida por cada juego. Si alguna vez tengo la oportunidad de trabajar en ese partido, sería una bendición absoluta”.