MÉXICO -- Como cada año, las lesiones aparecen alrededor de la NFL diezmando plantillas y en algunos casos acabando con las esperanzas de un club.
El caso más dramático de todos fue en el 2011, cuando una serie de cirugías en el cuello marginaron a Peyton Manning por toda la temporada y como consecuencia de ello los Indianapolis Colts terminaron con la primera selección global del draft como el peor equipo de la NFL.
Este año los ejemplos no son tan extremos, aunque también han tenido un impacto en la manera en que juegan sus equipos.
En primer lugar, tenemos a los Dallas Cowboys que perdieron por un tiempo considerable al mariscal de campo Tony Romo por una fractura en la clavícula izquierda. En ausencia de Romo, los Cowboys han sufrido cinco derrotas consecutivas pero la mediocridad de su división, NFC Este, les permite todavía pensar en colarse a los playoffs.
Con Romo en los controles, los Cowboys lucían como un serio contendiente en la NFC, sobre todo después de la remontada que dirigió en la Semana 1 sobre los New York Giants, con un pase de touchdown en lo segundos finales al ala cerrada Jason Witten.
Sin su mariscal estelar, la ofensiva de Dallas ha naufragado en la medianía y realizó un cambio de pasador al quitarle las riendas de la ofensiva a Brandon Weeden para darle su lugar a Matt Cassel, quien tampoco logró echar a andar el ataque.
Además de Romo, los Cowboys también perdieron por una lesión en el pie al receptor Dez Bryant, sin embargo, en ausencia de Bryant logró ganar un partido frente a los Philadelphia Eagles.
Pero no todas las lesiones deben ser negativas para un equipo, el ejemplo más claro son los Carolina Panthers que perdieron por toda la temporada al receptor abierto Kelvin Benjamin por un desgarre en el ligamento cruzado anterior.
Lejos de rezagarse por su ausencia en la ofensiva, Carolina elaboró un plan de juego involucrando más a su ataque terrestre y volteó hacia el ala cerrada Greg Olsen como objetivo principal del mariscal de campo Cam Newton.
La ofensiva de los Panthers ganó en solidez y el equipo marcha como el único invicto en la NFC.
Una de las mayores decepciones de la temporada han sido los Baltimore Ravens y las lesiones han influido mucho en eso.
Baltimore es uno de los equipos más golpeados de la liga, a lo largo de la temporada han perdido a titulares como Terrell Suggs, Matt Elam, Dennis Pitta y recientemente Steve Smith Sr., además también vieron caer a los confiables Will Davis y Lorenzo Taliaferro.
Con una plantilla cada vez más limitada, los Ravens han ido cuesta arriba en una temporada en la que sólo tienen dos victorias.
Luego de un inicio de temporada prometedor, los Buffalo Bills han caído en un bache que los alejó de la carrera por los playoffs, mismo que coincidió con las bajas por lesión del mariscal de campo Tyrod Taylor y el corredor LeSean McCoy, quien ha vuelto a la acción.
Buffalo también ha perdido por lapsos a los receptores Sammy Watkins y Percy Harvin, así como al corredor Karlos Williams.
En algún punto los Bills comenzarán a recuperar jugadores, pero podría ser demasiado tarde si se siguen rezagando en la AFC.
A pesar de marchar invictos, los Denver Broncos han tenido que sortear distintas lesiones esta campaña. El tackle izquierdo Ryan Clady quedó fuera desde antes que iniciara la temporada por una lesión en el ligamento cruzado anterior y su reemplazo Ty Sambrailo se dirige a la lista de reservas lesionados por un problema en el hombro, eso planteará un gran problema para Gary Kubiak en el futuro inmediato.
También, Denver vio caer al apoyador Shane Ray con una lesión en la rodilla pero su ausencia ha pasado desapercibida para la que actualmente es la mejor defensiva de la NFL.
Hablando de lesiones previas al inicio de la temporada, uno de los mayores golpes en ese departamento lo recibieron los Green Bay Packers con la lesión de rodilla del receptor abierto Jordy Nelson.
Nelson se había convertido en el blanco favorito del mariscal de campo Aaron Rodgers y su capacidad de girar para atrapar pases al hombro de atrás junto a su gran velocidad han dejado un gran vacío en Green Bay.
Los Packers se movieron en el mercado para repatriar al veterano James Jones, pero su falta de una amenaza verdadera a lo profundo quedó en evidencia en su visita a los Broncos, donde tuvieron su peor actuación ofensiva del año y vieron caer su récord invicto.
Los Kansas City Chiefs también sufrieron una dura pérdida cuando el corredor de Pro Bowl, Jamaal Charles, se desgarró el ligamento cruzado anterior y quedó fuera por toda la temporada.
Ningún jugador --no mariscal de campo-- es tan importante para la ofensiva de su equipo como Charles y su ausencia es imposible de cubrir para una plantilla que ha lucido tan corta de talento en el ataque.
Andy Reid ha recurrido a acarreos con el mariscal de campo Alex Smith y una rotación entre Charcandrick West y Knile Davis para tratar de compensar la falta de Charles, pero parece que el destino del equipo esta campaña ya ha quedado sellado.
Los campeones defensores New England Patriots también han batallado con las lesiones esta temporada con la ausencia del liniero titular Bryan Stork, quien es elegible para volver la próxima semana luego de una grave conmoción cerebral, su regreso no podría ser más oportuno luego que Nate Solder aterrizara en la lista de reservas lesionados por un problema en el codo, lo que dejó un vacío de liderazgo en la línea ofensiva.
A pesar de sus ausencias, New England se las ha arreglado para conservar su récord invicto y ser considerados favoritos no sólo para avanzar a los playoffs, sino para llegar al Super Bowl.
Durante la temporada baja, los Philadelphia Eagles acapararon los reflectores con un canje que sorprendió a todos alrededor de la NFL, enviaron a McCoy a los Bills a cambio del apoyador Kiko Alonso.
Al parecer, gran parte del plan defensivo de Philadelphia giraba alrededor de su apoyador recién adquirido, que realizó una de las jugadas más espectaculares del año en el partido frente a los Atlanta Falcons al interceptar un pase a una mano en su propia zona final.
Pero Alonso se lesionó la rodilla a la semana siguiente y la defensiva de los Eagles se derrumbó en su ausencia. No hay una fecha definida para su regreso y eso podría poner en riesgo la campaña de los Eagles a pesar de estar en una de las divisiones más débiles de la liga.
Finalmente, los Pittsburgh Steelers han sido las víctimas favoritas de las lesiones en los últimos años y ahora no iban a ser la excepción.
Previo al inicio de la campaña, el centro Maurkice Pouncey fue enviado a la lista de reservas lesionados con designación para volver por una fractura en el tobillo, misma que se agravó durante el proceso de rehabilitación y lo mantendrá fuera el resto del 2015.
Días después, el pateador de lugar Shaun Suisham se lesionó el ligamento cruzado anterior y su reemplazo Josh Scobee terminó siendo factor para que Pittsburgh acumulara derrotas en las primeras semanas de la campaña.
Cuando los Steelers parecían haber encontrado el rumbo, el mariscal de campo Ben Roethlisberger sufrió un esguince en la rodilla izquierda que lo marginó cuatro semanas, en donde el equipo probó con Michael Vick y Landry Jones en la posición sin tener los resultados esperados.
Roethlisberger volvió el domingo pasado frente a los Cincinnati Bengals, pero ese mismo día los Steelers perdieron por el resto de la campaña al corredor Le'Veon Bell.
Desafortunadamente, las lesiones son parte del juego, todos los equipos pierden talento cada año y deben encontrar la manera de salir adelante, sin embargo, hay algunos jugadores que son irreemplazables y su pérdida puede sellar el rumbo de una franquicia.