TEMPE -- No esperen tener claro el futuro de Larry Fitzgerald en la NFL en el corto plazo.
El receptor de los Arizona Cardinals sentenció que no sabe cuando llegará a una decisión, pero no será de inmediato.
"Me tomaré un tiempo para descifrarlo", dijo el veterano de 34 años que lleva 14 temporadas en la liga.
Fitzgerald firmó una extensión por una campaña el 17 de noviembre que va hasta la temporada 2018. No tiene planes de disfrutar en exceso después del partido del domingo, que, en caso que decida retirarse, sería su último en casa.
"Haré lo mismo que siempre. Saludaré a los muchachos del otro equipo y después me dirigiré al vestidor", dijo Fitzgerald. "No será diferente".
Se ha hablado mucho sobre su futuro en las últimas campañas. Tomó casi un mes después de la temporada 2016 para decidir que sí jugaría en la presente, confirmando su decisión el 1° de febrero del 2017.
Quizá en esta ocasión sea más tardado. Otros factores que podrían influir son las probables decisiones del entrenador en jefe Bruce Arians y del mariscal de campo Carson Palmer para poner fin a su carrera.
Fitzgerald tiene 92 recepciones para 982 yardas y cinco anotaciones en 2017. El martes, fue invitado a decimoprimer Pro Bowl.
Es tercero en la historia de la NFL en yardas (15,371) y recepciones (1,217) y es octavo en pases atrapados para touchdown (109). Participó en un Super Bowl, visitando un par de ocasiones las diagonales ante los Pittsburgh Steelers el 1° de febrero del 2009.
Recientemente se tomó un momento para reflexionar sobre lo que fue su primer juego en casa en la NFL, mismo que llegó en la Semana 2 del 2004 ante los New England Patriots en el Sun Devil Stadium.
"No fue agradable", comentó. "Recuerdo que Willie McGinest me derribó en una ruta cruzada y Rodney Harrison me estaba persiguiendo".
En general, Fitzgerald dijo que ha disfrutado su carrera.
"Ha sido un buen andar. Conocí a grandes personas y tengo extraordinarios recuerdos. Me hubiera gustado tener más victorias".