METAIRIE, La. -- El quarterback de los New Orleans Saints, Drew Brees, dijo que regresó "energizado" de un emotivo viaje de dos días a su casa, en el estado de Texas, donde acudió a los servicios funerarios de su abuelo y "héroe" personal Ray Akins.
Brees dijo que durante su viaje, entre lunes y martes, trajo lo necesario para preparar el primer juego de playoffs de los Saints, el domingo, contra los Carolina Panthers. Pero también pasó mucho tiempo reflexionando con su familia y amigos sobre la vida de su abuelo, un veterano de la Segunda Guerra Mundial y coach de futbol universitario por mucho tiempo.
"Ya saben, obviamente fue muy triste... pero, realmente, regrese con energía de los dos últimos días sólo por estar con mi familia, mis amigos y los muchachos que jugaron para mi abuelo, sólo escuchando esas historias otra vez", dijo Brees. "Simplemente, volví a hacer énfasis en el gran hombre sabio que fue, un verdadero héroe estadounidense. Y no sólo eso, es mi héroe. Aprendí mucho de él y otra vez hice énfasis en las cosas que son más importantes en la vida, en los valores y conceptos morales.
"Fueron unos días muy poderosos, obviamente, muy tristes por momentos, pero también increíbles, sólo por recordar su vida y su legado".
Brees, quien cumplirá 39 años en menos de dos semanas, está por primera vez en playoffs en cuatro años. Pero insistió que no va a la postemporada con algún sentido de urgencia mayor al que ha tenido en el pasado.
"Sólo aprovecho cada juego de la misma manera. Me preparo como si cada juego pudiera ser el último o un partido de playoffs, como si tuviera algo que probar y estuviera en el límite", dijo Brees, quien en 2017 lanzó su mejor cifra de yardas y touchdowns totales en 12 años con los Saints, mientras estableció un récord en la NFL con un porcentaje de pases completos de 72.0.
"Así que no es algo como decir, 'ok, los playoffs están aquí, así que es hora de dimensionarlo, las cosas son un poco más importantes'. Siempre es importante, así que para mí la preparación no es diferente".