COSTA MESA -- Una de las evaluaciones de Melvin Gordon saliendo de Wisconsin decía que no podía atrapar el ovoide desde el backfield. Gordon acumuló apenas 22 recepciones en su carrera con los Badgers.
No obstante, a lo largo de tres campañas con Los Angeles Chargers, Gordon ha convertido una aparente debilidad en una fortaleza a través de trabajo duro, atrapando pases adicionales después de la práctica o durante su rutina previa a los partidos.
El resultado es Gordon convirtiéndose en uno de los mejores corredores atrapando pases en la NFL.
Gordon finalizó con 58 recepciones para 476 yardas y cuatro touchdowns la temporada pasada. El coordinador ofensivo de los Chargers, Ken Whisenhunt, dijo que el rol de Gordon en el ataque aéreo podría expandirse más todavía en la siguiente campaña, particularmente con la pérdida de Hunter Henry por el año gracias a una lesión de ligamento anterior cruzado en la rodilla derecha.
"Podemos hacer cosas diferentes porque Melvin se ha vuelto tan buen receptor saliendo del backfield", ofreció Whisenhunt. "Y eso no es algo que viste a nivel colegial. No es que no lo pudiera hacer; simplemente no le lanzaron el ovoide. Estaba demasiado ocupado corriendo para 8 millones de yardas o lo que fuera que estaba corriendo.
"Así que, sí, ha sido un gran bono que hemos tenido. Esos dos tipos [Gordon y Austin Ekeler], y su adaptabilidad y flexibilidad pueden ayudar".
Gordon es parte de una tendencia en la liga donde los corredores han sido empleados cada vez más en el ataque aéreo. De acuerdo a ESPN Stats & Information, los corredores totalizaron 2,757 recepciones en el 2017, la mayor cantidad en una campaña desde el 2002 (2,858).
Le'Veon Bell (85 recepciones), Alvin Kamara (81), Christian McCaffrey (80) y Duke Johnson (74) culminaron entre los mejores 20 en la NFL en atrapadas el año pasado.
Gordon dijo que una de sus metas del receso de temporada era mejorar su producción como receptor.
"En el juego aéreo, simplemente en lo que toca a la expansión de rutas, simplemente en esa dirección", señaló Gordon. "Llegará. Sé que Whiz [Whisenhunt] crea cosas aquí y allá dependiendo de lo que ve de la defensiva, pero [Philip Rivers] te hará llegar el ovoide de cualquier modo, así que no estoy realmente muy presionado por ello. Estaremos bien en esa área".
También ayudando a Gordon a crecer como receptor está uno de los mejores corredores atrapando pases que jamás haya practicado este deporte, el miembro del Salón de la Fama, LaDainian Tomlinson.
El ex estelar de los Chargers finalizó su carrera con 624 atrapadas para 4,772 yardas y 17 touchdowns. En el 2003 impuso marca personal con 100 recepciones.
Solamente Marshall Faulk tiene más recepciones entre los 10 mejores corredores en términos de yardas terrestres.
Con Henry fuera por el año, Tomlinson dice que Gordon necesitará convertirse en pieza más importante del juego aéreo de los Chargers.
"Verdaderamente, lo primero que pensé cuando se lesionó Hunter fue que Melvin tendría que convertirse en un arma del juego aéreo", explicó Tomlinson. "Hunter facilita los pases para Philip, primeros intentos sencillos y jugadas de zona roja sencillas. Ahora alguien debe tomar ese rol, y puede ser Melvin. Incluso si son jugadas de pase pantalla o pequeñas rutas como válvula de escape saliendo del backfield en pareos uno contra uno, necesita ser capaz de aportarlas para Philip más que nunca porque Hunter está fuera".
Tomlinson dice que usualmente se sienta con Gordon y habla de sus metas para el siguiente año antes del arranque de temporada, pero todavía no se reúne con el producto de Wisconsin durante el receso de campaña.
Tomlinson dijo que el incremento en producción de Gordon en el juego aéreo es parte de su evolución natural, y un proceso similar al que atravesó el producto de TCU como jugador.
"Lo que van a ver es un jugador más cómodo en la ofensiva", dijo Tomlinson respecto a Gordon. "Su rol en la ofensiva ha evolucionado, y ya no se trata solamente de acarrear el balón y sumar yardas complicadas. Ahora se convierte en un activo en el juego aéreo donde debes ser un objetivo para Philip.
"La mayoría de coaches no van a poner demasiada presión del juego aéreo en un corredor novato. Así que pienso que, en el primer año, es lo que vimos de Melvin. Y luego en el segundo año, ustedes lo vieron empezar a ser más una salida para Philip Rivers, las rutas de columpio, permitiendo a Philip poner rápidamente el balón en manos de Melvin y permitiéndole hacer jugadas".