OXNARD -- El corredor Ezekiel Elliott no se encuentra en el avión a Los Angeles con la mayoría de los jugadores y coaches de los Dallas Cowboys para el arranque del campamento de entrenamiento en Oxnard, California, dijeron fuentes múltiples a ESPN este jueves.
Eso no significa que Elliott no se presentará al campamento, todavía. Los jugadores deben presentarse al River Ridge Residence Inn para el viernes por la mañana a tiempo para exámenes físicos y pruebas de acondicionamiento antes de poder ser considerados demorados para el inicio del campamento, y quedar sujetos a multas.
La primera práctica de los Cowboys es el sábado.
Rumores han persistido a lo largo de la mayor parte del campamento en el sentido de que Elliott boicotearía el campamento con la esperanza de obtener una extensión a largo plazo, pero no se perdió ningún día del programa voluntario de temporada baja ni del minicampamento obligatorio. Está bajo contrato por dos años más, y tendrá programado cobrar 3.85 millones de dólares en el 2019 y 9.09 millones en el 2020 bajo la opción de quinto año que hizo válida el equipo durante la primavera.
El agente de Elliott, Rocky Arceneaux, no devolvió llamadas en busca de comentario.
El head coach Jason Garrett dijo a reporteros el miércoles que esperaba ver a Elliott presente en el avión.
Si Elliott no reporta, podría estar sujeto a multas de aproximadamente 30,000 dólares diarios, mientras que un partido perdido de pretemporada le costaría aproximadamente 226,000 dólares. En caso de no reportar antes del 6 de agosto, no sumaría una temporada jugada de cara a la agencia libre.
Los Cowboys y Arceneaux han tenido discusiones en las dos últimas semanas respecto al acuerdo, pero fuentes dijeron que no hay nada inminente.
Una vez que el equipo arribe a Oxnard, el plan es arrancar las negociaciones con el quarterback Dak Prescott y el receptor abierto Amari Cooper, quienes están en el año final de sus respectivos convenios, pero el propietario y gerente general manager Jerry Jones dijo que los Cowboys no tienen un orden de preferencia para cuál contrato será finalizado primero, incluyendo el de Elliott.
Los Angeles Rams firmaron a Todd Gurley II a una extensión lucrativa en el pasado receso de campaña luego de su tercera campaña, y Elliott querría asegurar lo mismo.
Elliott ha liderado a la NFL en yardas terrestres en dos de sus primeras tres temporadas, pero se perdió seis partidos del 2017 por una suspensión. Recientemente, evitó una penalidad de la liga bajo la política de conducta personal luego de un incidente en Las Vegas. Los Cowboys han apoyado a Elliott pese a sus problemas fuera del campo, y el vicepresidente de los Cowboys, Stephen Jones, dijo que lo ocurrido en Las Vegas no sería factor para las negociaciones.
Los Cowboys tienen espacio de sobra bajo el tope salarial para finalizar un acuerdo, sumando 5 millones de dólares adicionales con la baja del receptor abierto Allen Hurns el miércoles.
El equipo posee una historia de finalizar acuerdos con jugadores durante el campamento, con Tyron Smith y Travis Frederick siendo los más recientes, y les gustaría conseguir acuerdos para Prescott, Cooper y Elliott, de ser posible.
Por ahora, sin embargo, comienza la guardia por Elliott.