La noche del mariscal de campo de los Seattle Seahawks, Paxton Lynch, terminó prematuramente.
En el último cuarto del partido de pretemporada contra los Minnesota Vikings, Lynch tuvo que abandonar el campo tras recibir un golpe en la cabeza.
Con 3:53 por jugar, Lynch escapó por tierra y cuando se deslizó para finalizar el acarreo fue golpeado en el casco por el esquinero Holton Hill, quien bajó su cabeza para hacer contacto con el pasador.
Tras el golpe, Hill fue castigado por rudeza innecesaria y posteriormente fue expulsado del juego.
La campaña pasada, Hill apareció en 16 partidos para los Vikings, tres de ellos como titular, acumulando una intercepción, siete pases desviados y 36 tacleadas.
Durante la temporada baja, Hill recibió dos suspensiones por cuatro partidos por violar las políticas de abuso de substancias de la liga.
J.T. Barrett ingresó al campo para reemplazar a Lynch, quien dejó el juego con seis pases completos en 15 intentos para 67 yardas además de dos acarreos para pérdida de 1 yarda.
Esta no fue la única baja por lesión para los Seahawks, que perdieron al back defensivo Marquise Blair, quien se lastimó la espalda.