METAIRIE, La. -- Los New Orleans Saints no contarán las próximas dos semanas con su principal esquinero nickel, P.J. Williams, quien fue suspendido por dos juegos por violar la política de sustancias prohibidas de la NFL.
La sanción se deriva de un incidente en enero en el que Williams fue arrestado y originalmente acusado de conducir intoxicado, pero el caso se resolvió en agosto cuando se declaró culpable de un cargo menor por operar sin precaución un vehículo motorizado.
Williams, de 26 años, ha jugado en más del 80 por ciento de jugadas defensivas de los Saints en la actual temporada con dos pases defendidos y una captura en cinco de seis partidos como titular.
Ante la suspensión, los Saints tiene profundidad en la posición con C.J. Gardnder-Johnson, quien ha participado en cerca de 10 jugadas por juego en paquetes nickel y dime y con el veterano de 10 años, Patrick Robinson, quien se había establecido como uno de los mejores esquineros en zona interna en la liga antes de sufrir la fractura del tobillo en septiembre pasado.
Williams, selección de tercera ronda por los Saints en el draft de 2015, jugó bien en ausencia de Robinson la temporada pasada y luego lo venció en la lucha por la titularidad en la pretemporada pasada. Robinson participó en sólo siete jugadas defensivas en 2019, pese a estar en el segundo año de un contrato por cuatro y $20 millones.
La defensiva de los Saints ha sido una de las responsables del éxito del equipo, especialmente desde que el quarterback Drew Brees quedó fuera de acción por una lesión en el pulgar en la Semana 2. New Orleans está 4-0 sin Bres y la defensiva se ha ubicado entre las 10 mejores en yardas y puntos permitidos, defensiva contra la carrera y contra el pase en ese periodo.
Williams batalló con lesiones e inconsistencia al inicio de su carrera, pero ha tenido sus mejores momentos desde que cambió a la posición de esquinero nickel el año pasado. En el reciente receso de temporada firmó con los Saints por un año con $2.25 millones garantizados totalmente.
El arresto de Williams se dio sólo tres días después de la derrota de los Saints en el Juego de Campeonato de la NFC, luego de que fue detenido por manejar a 80 millas por hora en una zona de 50 y se rehusó a hacer la prueba del alcoholímetro.
Antes del draft de 2015, Williams fue arrestado por manejar en estado de ebriedad, pero la acusación fue retirada y en 2014, cuando estaba en Florida State, estuvo involucrado en un accidente de auto en el que dejó la escena y volvió 20 minutos después. Fue acusaso de no obedecer una señal de tránsito y la policía no sospechó de que condujera intoxicado en esa ocasión.