¿Qué lleva a las personas a apostar tanto en un volado?
Con el inicio del Super Bowl a minutos de distancia, la escena dentro de la trastienda de la casa de apuestas de Las Vegas es intensa.
Los corredores de apuestas miran sus computadoras, y un ejecutivo camina de un lado a otro, ya sudando con su traje dominical. Las apuestas llegan; millones de dólares en juego. Es acción sin parar.
De repente, la habitación se queda en silencio y todos se detienen para mirar los televisores. Árbitros, capitanes de equipo se reúnen en el centro del campo para el volado. En la casa de apuestas, hay un anticipado jadeo cuando la moneada se lanza al aire. Cara o cruz para determinar qué equipo obtiene el balón primero y quién se queda con el dinero apostado en el volado.
La moneda gira de un extremo a otro, rebota en el campo y se posa en cara. El jefe estresado rápidamente pregunta: “¿cómo nos fue?”.
Un empleado califica apresuramente las apuestas, respira hondo y responde con temor: “Acabamos de perder 38, 000. Estamos estancados con 38 monedas de diez centavos y el juego ni siquiera ha comenzado”.
El jefe hace otra pregunta: “¿Qué demonios?”.
El lanzamiento de una moneda del Super Bowl puede ser los dos mejores segundos en las apuestas deportivas, y la cantidad de dinero que cambia de manos es ridícula. De los cientos de opciones de apuestas en el Super Bowl --desde el color de la bebida que se le arrojará al entrenador ganador, a quién agradece primero el JMV en su discurso—hay más dinero en el volado que en cualquiera de ellos.
“Pones todo este trabajo para sacar todas estas apuestas, inventas cruces y todo lo demás”, dijo Sharapan, un corredor de apuestas de Las Vegas desde hace mucho tiempo. “Y el lanzamiento de moneda es el más apostado de todos, todos los años”.
Cara o cruz
El volado en el Super Bowl ha estado en el tablero de las casas de apuestas de Las Vegas durante décadas. Cara o cruz, que equipo ganará el sorteo y si ese equipo decidirá tomar el balón, jugar a la defensiva o ceder la segunda mitad, puedes apostar a todo. Y mucha gente lo hace, a pesar de que se les cobra más de 5 centavos por dólar en lo que debería ser esencialmente una apuesta 50-50. (Este estudio de la Universidad de Stanford usó un vector de momento angular para demostrar que una moneda lanzada y atrapada en la mano está predispuesta a aterrizar de la misma manera que comenzó. Pero la moneda del Super Bowl termina en el suelo y a menudo rebota y, además, ¿qué sabe Stanford de todos modos?).
Vince Bohbot, por otro lado, sabe todo sobre la moneda real usada para el Super Bowl. Bohbot es vicepresidente ejecutivo de The Highland Mint en Melbourne, Florida. Durante los últimos 28 Super Bowls, The Highland Mint ha hecho la moneda para el volado.
En la década de 1990, las monedas estaban hechas de plata pura. Ahora, con el precio de la plata subiendo, las monedas cuentan con un baño de plata y un selectivo baño de oro de 25 quilates. Las monedas son de tamaño similar a un dólar de plata. Pesan alrededor de una onza y tienen un diámetro de 33 milímetros.
La moneda de este año presenta olas del océano que corren horizontalmente entre los logotipos del equipo de los Kansas City Chiefs y los Tampa Bay Buccaneers en un lado. El logo del Super Bowl LV, con el trofeo Lombardi entre la L y la V el otro lado. Tradicionalmente, el lado con el trofeo Lombardi se designa como cabeza. Ambos lados pesan prácticamente lo mismo, según Bohbot.
“Está tan cerca; puede haber una pequeña diferencia en un lado. Depende del diseño cada año”, aceptó para ESPN. “No parece haber afectado donde cae la moneda cada año”.
Masivo interés en un volado
Apostar al lanzamiento de la moneda es una tontería, por supuesto, y el tamaño de la mayoría de las apuestas lo refleja. La mayoría, pero no todas.
Por salvaje que parezca, las apuestas de cinco cifras en el lanzamiento de una moneda son prácticamente algo habitual. Y ha habido incluso más grandes.
Art Manteris, quien ha pasado más de 40 años dirigiendo casas de apuestas deportivas en Las Vegas, recuerda a uno de sus grandes apostadores en el viejo Hilton apostando 100 mil en el lanzamiento de la moneda, solo para regresar unas horas después para apostar al otro lado por 200 mil.
“Dijo que cambió de opinión”, recuerda Manteris, ahora vicepresidente de Station Casinos. “El cambio funcionó para él ese día”.
El número de apuestas en el volado es uno de los primeros que memorizan los cajeros que trabajan en las ventanillas de apuestas para el Super Bowl. Necesitan el número para ingresar la apuesta en el sistema, algo que hacen repetidamente al lanzar la moneda. El apostador rara vez conoce el número de apuesta, dice Sharapan.
En su tiempo trabajando en las ventanillas de apuestas el domingo de Super Bowl, Sharapan escuchó todo tipo de teorías: desde los apostadores que lanzan monedas desde el lado de la cruz, supuestamente más pesado, hasta las superficies de césped que producen más caras debido al rebote adicional. Sin embargo, nada se cita más que “la cruz nunca falla”.
“Solíamos hacer una línea entre la chica o chico de lado y yo sobre cuántas veces oiríamos ‘la cola nunca falla’, durante el turno”, recordó Sharapan. “Manteníamos una hoja de registro detrás del mostrador. Poníamos la línea en 18.5. Siempre se pasaba”.
Para irritar a sus compañeros de trabajo y ganar la apuesta, Sharapan les preguntaba a los clientes que apostaban al volado, si alguna vez habían escuchado ese viejo dicho sobre la cruz. Inevitablemente, el apostante soltaba: “la cruz nunca falla”. Por cierto, las cruces a veces fallan. En los 54 Super Bowls, el volado ha dado cara 25 veces.
Las apuestas de lanzamiento de moneda no son solo una cosa estadounidense. También es popular en el extranjero.
“Siempre ha sido una apuesta con apoyo popular, ya sea en Estados Unidos o en el extranjero”, dijo Andrew Mannino, analista senior de PointsBet, un corredor de apuestas australiano que se unió al mercado estadounidense en los últimos años.
Las casas de apuestas no saben exactamente qué impulsa el interés por el volado, y realmente no les importa. Después de todo, es bueno cobrar una cuota de cinco centavos por la apuesta.
El año pasado, se apostó más dinero (unos cientos de miles de dólares) en el lanzamiento de la moneda que en cualquier otra apuesta fuera del juego en los libros de William Hill U.S. Con la compañía operando en varios estados más este año, se espera que las apuestas en el volado aumenten significativamente.
“El año pasado, necesitábamos ‘la cruz nunca falla’ y obtuvimos el resultado que queríamos”, dijo Adam Pullen, subdirector de operaciones de William Hill U.S.
FanDuel no fue tan afortunado el año pasado y pagó 200 mil en apuestas a cruz, incluso antes de que comenzara el partido. Había mucho dinero en cara, por supuesto, pero no tanto como con cruz, y el pago de 200 mil da una idea de cuánto se está apostando en el volado.
“Me sorprenden todos los años los dólares”, dijo Nick Bogdanovich, director de comercio de William Hill U.S. “Simplemente apuestan. Me asombro cada año”.