FRISCO -- El draft del 2021 de la NFL está a unos meses, pero ya parece haber un camino para que los Dallas Cowboys ayuden a su defensiva para la próxima temporada.
El proceso de tiene todavía algunos capítulos por escribirse, especialmente sin el tradicional Combinado de Talento y las visitas previas al draft, así que una tabla de evaluación no está ni cerca de quedar finalizada, pero con la décima selección global, los Cowboys podrían tener la oportunidad de elegir al mejor defensivo disponible.
En su más reciente simulación de draft, Todd McShay de ESPN tiene a los Cowboys seleccionando al esquinero de Virginia Tech, Caleb Farley. Apréndanse ese nombre. Lo mismo con el esquinero de Alabama, Patrick Surtain II. En la aparente interminable temporada de mock drafts, esos nombres serán comúnmente vinculaos a los Cowboys.
Necesitando una mejoría en la secundaria, y potencialmente perdiendo a los esquineros Chidobe Awuzie y Jourdan Lewis en la agencia libre, Farley y Surtain --o Surtain y Farley, dependiendo de tu preferencia-- no solamente se ocuparían de una necesidad, sino también un requerimiento.
Pero, no nos enfoquemos solamente en los esquineros. Miremos otras posibilidades con el turno N° 10, al tiempo que entendemos la necesidad de los Cowboys de mejorar a una defensiva que permitió la mayor cantidad de puntos (473) en la historia de la franquicia, en el 2020.
¿Qué hay con reclutar a un quarterback?
Si los Cowboys no tienen a Dak Prescott firmado para cuando llegue el draft, seleccionar a un quarterback en la primera ronda podría tener sentido. Quizás haya escenarios donde Justin Fields (Ohio State) caiga algunos lugares, o realmente se enamoran de lo que Trey Lance (North Dakota State) puede proyectar como profesional. Olvídense de Trevor Lawrence de Clemson y Zach Wilson de BYU, porque ellos habrán sido seleccionados --quizás Fields también-- para cuando llegue el turno de Dallas.
¿Cómo mejora a los Cowboys reclutar a un quarterback en el 2021? Los Green Bay Packers fueron criticados por tomar a Jordan Love en el turno N° 26 global el año pasado, cuando tenían a Aaron Rodgers jugando a un alto nivel y bajo contrato.
Los Cowboys estarían creando más que una controversia de quarterback al hacer esto. Sería un anuncio de que se trata de los años finales de Prescott en Dallas.
¿El mejor jugador disponible podría ser la mejor ruta?
Los Cowboys hicieron eso en el 2020 reclutando al receptor abierto CeeDee Lamb en el N° 17 global. Ninguno de los mock drafts tenía a Lamb disponible para cuando les tocara elegir, pero era un jugador demasiado bueno para dejar pasar. Y Lamb cumplió como novato, atrapando 74 pases para 935 yardas y cinco touchdowns, un heredero digno para el jersey N° 88.
Tomar al mejor jugador disponible nunca es la respuesta equivocada, pero no siempre significa que sea lo correcto. El ala cerrada de Florida, Kyle Pitts, podría ser ese tipo, y sería más que un ala cerrada para cualqueir equipo de la NFL. Pero, ¿necesitan los Cowboys otra arma ofensiva con una unidad que ya cuenta con Ezekiel Elliott, Amari Cooper, Lamb, Michael Gallup, Blake Jarwin, Tony Pollard y Dalton Schultz?
¿Podrían los Cowboys ir por un tackle ofensivo?
Esta movida seguiría la línea del mejor jugador disponible, hasta cierto punto, pero se podría argumentar que los Cowboys sí requieren un tackle. La'el Collins no participó en una jugada durante el 2020 por una lesión de cadera. Tyron Smith jugó en dos partidos antes de someterse a una cirugía en el cuello.
Smith se mantiene como uno de los mejores tackles de la NFL, pero los Cowboys necesitan pensar en un futuro sin él. Smith, quien tiene 30 años de edad y está por comenzar su temporada N° 11, se ha perdido tres partidos por temporada desde el 2016 y 2019. Existe mucho desgaste, pero si la cirugía en el cuello repara un problema que le ha molestado durante el último par de años, entonces Smith podría regresar y seleccionar a un tackle tan alto para que juegue un puñado de partidos no ayudaría de inmediato.
Mantengan el ojo puesto sobre Rashawn Slater de Northwestern, quien optó por no jugar la temporada del 2020, pero mostró en el 2019 que puede ser un liniero dominante. Es considerado el segundo mejor tackle ofensivo después de Penei Sewell de Oregon.
La última vez que los Cowboys tomar a un tackle tan alto en la primera ronda fue el propio Smith, noveno global en el 2011. Antes de Smith, Dallas no había seleccionado a un liniero ofensivo en la primera ronda desde 1981.
¿Seleccionar a un liniero defensivo en el N° 10?
Considerando los huecos que tienen los Cowboys, tomar a un liniero defensivo tendría sentido. Desafortunadamente, no parece haber un especialista en cazar quarterbacks o un firme tackle defensivo que valga la pena tomar en el N° 10. La última vez que no hubo liniero defensivo seleccionado entre los primeros 10 turnos fue en el 2012.
Esto podría llevar a los Cowboys a un escenario de potencialmente bajar en el orden de selecciones, pero tendrían que esperar que hubiera un jugador que llame la atención suficiente para querer ascender. Si se mantiene la sabiduría convencional respecto a los rankings de prospectos, entonces, linieros como Christian Barmore de Alabama, Azeez Ojulari de Georgia y Kwity Paye de Michigan, o Gregory Rousseau de Miami, podrían ser opciones.
¿Qué hay con linebacker o safety?
En la posición de linebacker, Micah Parsons sería el jugador más lógico. El producto de Penn State ha cabildeado en redes sociales para ser elegido por los Cowboys. Parsons optó por no jugar la campaña del 2020, pero es considerado un gran atleta con altísimo potencial.
Si los Cowboys retienen al linebacker Jaylon Smith, no hay motivo para realizar este movimiento. Si Dallas sigue adelante sin Smith, tiene más sentido, ¿pero todavía es demasiado alto el décimo turno para un linebacker tradicional?
Los Cowboys no han hecho de la posición de safety una prioridad en años, ya sea agencia libre o el draft. ¿Ayudará el coordinador defensivo nuevo, Dan Quinn, a replantear esa estrategia?
La camada de safeties parece sólida, pero ninguno que valga la pena elegir en el turno N° 10. Incluso, una selección de segunda ronda en la posición de safety podría ser muy fuera de carácter respecto a cómo han operado los Cowboys en la posición en años recientes.