Miguel Borja selló la clasificación de River Plate a la final del Trofeo de Campeones con un golazo para el triunfo 3-2 ante Banfield. Se acopló bien en ataque con Salomón Rondón.
En su quinto partido como técnico de la banda roja, el técnico Martín Demichelis puso doble nueve para el ataque. Acompañó al colombiano con el venezolano para esta semifinal en Córdoba y las sensaciones fueron positivas.
Pueden jugar juntos. Comparten características. Fuerza física, instinto de gol y potencia en el área. Borja jugó más adelantado. Sus movimientos de entrada y salida con Rondón fueron coordinados. Aplicaron juntos la presión alta, pero nunca se estorbaron en la zona definitiva.
Su combinación más destacada la tuvieron al principio del segundo tiempo. Miguel ganó la pelota en la mitad, abrió para Rondón a la izquierda, quien devolvió la pared al punto penal con mala definición para el delantero de frente al arco.
La reivindicación llegó de inmediato. Borja reclamó su gol con una jugada por la derecha en la que volvió a descargar, picó al espacio, dejó atrás a su defensor y con derecha clavó su remata para el 3-1 parcial.
Salió con molestia muscular a los 83'. Su rendimiento fue parecido al de la victoria de Colombia 3-1 a Chile por la Eliminatoria en Barranquilla cuando hubo dos puntas. El otro, Rafa Borré.
El colombiano completó 11 goles con el equipo millonario. Disputará la final del Trofeo de Campeones de 2020 ante Boca Juniors.
Su próximo partido será el domingo 26 de febrero contra Arsenal, por la quinta fecha del torneo argentino en el Monumental.