En un mano a mano con ESPN Fútbol 90, Juan Román Riquelme, flamante presidente de Boca Juniors, confirmó que Lautaro Blanco será el tercer refuerzo del plantel xeneize.
Tras las llegadas de Cristian Lema y Kevin Zenón, el fichaje del lateral formado en Rosario Central fue sorpresivo, aunque el club aún no lo hizo oficial y había otros nombres circulando, pero no el suyo.
En la entrevista con Sebastián Vignolo y su equipo, Riquelme explicó cómo se cerró esta operación casi secreta: "Es una buena oportunidad. Hablaron con (Aaron) Molinas y les comunicó que le gustaría ir a Defensa y Justicia por su forma de jugar, y existió la posibilidad del lateral, creemos que tiene buenas condiciones y lo hizo bien en Rosario Central".
La clave del acuerdo es que el representante de ambos jugadores es Christian Bragarnik, quien además es uno de los propietarios del Elche, club donde está actualmente Blanco.
El defensor, que llegó al equipo español hace dos temporadas procedente de Rosario Central, apenas ha tenido protagonismo esta campaña en el equipo ilicitano, dirigido por su compatriota Sebastián Beccacece.
El lateral internacional, una de las grandes apuestas económicas del club durante su etapa en Primera, estaría incluido en una operación a tres bandas, por la que Boca adquiriría la mitad de la ficha del jugador del Elche y vendería a Defensa y Justicia la mitad de los derechos económicos y los derechos federativos de Aaron Molinas, que ya juega a préstamo en ese club
Blanco llegó al Elche en el pasado mercado de invierno y tuvo cierto protagonismo hasta el final del campeonato tras participar en 17 partidos.
Esta temporada, en cambio el rosarino sólo ha participado en diez partidos de Liga, y solo tres como titular, y Beccacece lo ha dejado fuera de las convocatorias en las últimas jornadas para que resuelva su situación en la entidad.