No puede festejar dos victorias seguidas. Diego Martínez, en este año, al frente de Boca Juniors, sigue sin poder sumar dos triunfos en fila. Esta vez, en Santa Fe, su equipo perdió 1-0 en la visita a Unión por la novena fecha de la Copa de la Liga y así fue su rival el que desplazó a Racing Club del cuarto puesto en el Grupo B, en busca de meterse en zona de clasificación a la siguiente etapa.
El partido en el Estadio 15 de Abril no fue positivo para Boca, que volvió a mostrarse irregular. Venía de superar 3-2 a Belgrano en La Bombonera, con el primer triplete de Edinson Cavani, cortando así el uruguayo una sequía importante en el club. Pero estuvo lejos de repetir algo así, en un partido en el que Unión llegó más y mejor al arco del Xeneize.
Ahora Boca, tras nueve fechas, se vio superado por Unión, que pasó a la Academia de Avellaneda con 15 puntos en el Grupo B, mientras que Racing tiene 14. El conjunto de Martínez se quedó con 13 y, de esta forma, en el quinto puesto, no pasaría a la siguiente ronda.
Ante la prensa, Martínez contó sus sensaciones en conferencia: "Nos costó, nos faltó fluidez y no pudimos lastimar a la espalda de Luna Diale. Los duelos que nos propuso Unión no los ganó todos, pero se impuso en general. Y así se definió un partido así, parejo, con una pelota parada".
"No me gustó el partido que hicimos, no fue bueno y debemos seguir mejorando de cara a lo que viene. Fue flojo, de los peores que tuvimos. ¿Equi Fernández? Es una pieza muy importante y el equipo lo solucionó ante Belgrano, pero hoy nos costó por los duelos individuales con los volantes. Nos costó sostener a la hora de jugar en el campo rival. No fue un buen partido", remarcó el DT.
"No tuvimos frescura y podía ser esperable por la cercanía de partidos y el viaje, pero nos faltó esa chispa que habíamos mostrado contra Belgrano. Estas derrotas duelen, lo noté en los muchachos... Igual estos golpes te fortalecen. Cuando en partidos así, que no podés lograr un buen funcionamiento, parecía que sería un empate", agregó.
"Por la seguidilla de partidos, los jugadores están bien, con el cansancio lógico, pero bueno. Repito: esta vez nos faltó chispa, pero el grupo tiene en claro lo que quiere y buscaremos volver a la victoria para seguir prendidos en la tabla del torneo", expresó Martínez, serio y preocupado.
"Lo que más me ocupa ahora es recuperar el crecimiento que había mostrado Boca a través del juego. En el segundo tiempo hubo cosas que hicimos de mejor manera, pero nos faltó... El fútbol argentino es irregular, es difícil poder ganar, porque todos los equipos están más parejos. La diferencia que antes había entre un grande y uno a priori más débil ya ahora no se ve", destacó.
"Hice algunos cambios para refrescar, desde el arranque y luego en el segundo tiempo, pero no se pudo, no tuvimos el aire suficiente. El partido había entrado en una meseta, con ambos neutralizándonos igual, pero nos convirtieron por una pelota parada y perdimos. Nos costó todo, también que les llegaran chances claras a los dos delanteros. Unión nos presionó alto y recién en la segunda mitad pudimos jugar más en el campo de ellos", dijo.
Para el final, llegó la consulta por el gran duelo que se viene contra Racing. "Tenemos que ver, como siempre, siendo autocríticos, lo que hicimos mal, y ahora por suerte el domingo tendremos una final y esperemos crecer y rendir bien", remató. Está claro que Boca debe mejorar bastante y el entrenador lo sabe muy bien.