La ANFP tiene programada la fecha del fútbol profesional para este fin de semana, pero los clubes aún tienen la incertidumbre de si se jugará o no, en especial por el llamado de las barras a boicotear la vuelta del Campeonato Nacional.
A primera hora, la hinchada de Huachipato, “Los Acereros”, comunicó que no están de acuerdo con la reanudación del torneo y señalaron que no permitirán que se juegue en la provincia de Concepción.
El elenco de la usina jugará este domingo, a las 11:30 horas, frente a Universidad de Chile en el estadio CAP, por lo que Ángelo Henríquez se refirió a la postura tomada por los aficionados siderúrgicos: “Nuestra postura es la misma desde que comenzó esto: de jugar si están las medidas de seguridad. Nosotros siempre nos preparamos para el duelo que programen para estar listos para jugar cuando se reanude”, inició diciendo el ariete en conferencia de prensa.
El delantero no está tan seguro de que el deporte perjudique las demandas sociales, ya que son temas más grandes que la disciplina: “Esto abarca a mucha gente y si está en contra de que se juegue y quieren boicotear, es difícil que haya seguridad en el estadio con tanta masa de gente, como lleva la U”.
“La gente está reacia por un tema social, de frustración, de no tener respuestas instantáneas del gobierno. Las demandas sociales son entendibles, pero no se ha obtenido una respuesta concreta y transparente. La gente seguirá enojada y peleando por lo que hacen hoy. Es un tema difícil, no sé cuando se resolverá por el bien del fútbol chileno”, añadió el atacante.
También, afirmó que están preocupados de las personas que viven gracias al fútbol: “Nos preocupamos no solo del futbolista de Primera, sino de la gente que tiene ingresos económicos gracias al fútbol, como los vendedores del estadio. Participamos en sus ganancias”.
“Es complicado, porque por un lado está las demandas y otros desesperados por querer trabajar. Y quedamos en el espacio, depende lo que diga la seguridad del país. Tenemos que preocuparnos de nuestro trabajo”, profundizó.