Alexander Barboza, una de las figuras del Botafogo campeón de la CONMEBOL Libertadores 2024, expresó en diálogo con SportsCenter toda su emoción por el título, tras la victoria 3-1 ante Atlético Mineiro. Además, mostró su expectativa por una posible convocatoria para la Selección de Uruguay.
El zaguero de 29 años, que en la Copa disputó los 15 partidos del Fogao, 13 de ellos como titular, expresó: "Es mágico. Primera vez que logro este objetivo, también primera vez para el club. Ya ganar una Copa Libertadores es algo único, muy difícil, pocas veces un jugador lo consigue, y que sea en un club que es la primera que la gana, es mejor todavía".
"Lloré ayer a la noche, lloré hoy al mediodía, lloré cada vez que mis papás me hablaban, lloré durante el partido, lloré antes de que arranque. Soy un pibe que tiene cara de malo, pero soy de lágrimas bastantes fáciles. Pensé en cada una de las personas que desde el día uno me acompañaron e hicieron de todo para que yo hoy sea jugador profesional", añadió quien anotó un gol en la semifinal de ida ante Peñarol.
Y profundizó: "Se me pasaban muchas cosas, lo que iba a jugar; la realidad es que cuando tomaba dimensión de lo que hoy iba a pasar, que era que íbamos a ser campeones, lloraba, porque necesitaba ser campeón, necesitaba que sea acá en Argentina, con mi familia y 70 personas mirándome. Es una cosa de locos".
Además, el futbolista surgido de River Plate dijo que el nuevo Monumental "es una locura y muy pero muy muy diferente" a lo que era cuando él jugó en Núñez, definiéndolo como "hermoso, grande e increíble", y se ilusionó con ganar el Brasileirao, en el que le sacan tres puntos a Palmeiras con dos partidos por delante: "Nosotros tenemos que ganar, para salir campeones tenemos que esperar que Palmeiras pierda. Nosotros tenemos que hacer nuestro trabajo, que es ganar".
"El año pasado fue muy difícil para todos los chicos que estuvieron acá, no me tocó estar, pero sé lo que pasaron por estar hablando con ellos. Fue muy duro y hoy los que más se lo merecían eran todos esos chicos, que sufrieron muchísimo el año pasado, por las críticas y porque el Brasileirao, que lo tenían en las manos, se les escapó, y hoy coronar con esto es algo hermoso", ahondó quien también vistió las camisetas de Atlético Rafaela, Defensa y Justicia, Independiente y Libertad de Paraguay.
Asimismo, Barboza contó cómo es en el vestuario: "Yo trato de ser referente, por mi personalidad, por mi manera de ser, soy alguien que trata de liderar y ayudar a mis compañeros. El título de referente o no lo pone la gente o el técnico o los compañeros, yo trato de ayudar con mi formas para que el equipo gane".
La ilusión por la Selección Uruguaya
El defensor nacido en Villa Celina también remarcó su deseo de finalizar los trámites para ser uruguayo y poder ser convocado por Marcelo Bielsa para la Celeste: "La realidad es que estoy haciendo todos los papeles para la Selección Uruguaya, ya lo tengo más o menos hablado y están todos los papeles en trámite. Esperemos que salgan pronto y para la próxima convocatoria, si Dios quiere, estar ahí"
"Es la idea, hay que seguir en este nivel, ganando cosas y jugando bien, porque si no no hay título de Libertadores que valga. La próxima citación es en marzo y queda bastante, entonces hay que trabajar, procurar que salgan los papeles rápido, y una vez que estén, estar a disposición. Estoy muy muy ilusionado", continuó Barboza.
Y contó por dónde viene su sangre charrúa: "Mi papa es uruguayo, toda su familia también, mis hermanos son uruguayos. Yo no lo había hecho antes porque estando en Paraguay es muy difícil que te lleve la Selección de Uruguay jugando ahí, no era algo que yo sentía latente, pero hoy estando en Botafogo, un club con mucha más exposición, creía que era posible. Lo hablé con mi papá y con mis tíos, empezamos los trámites y hoy está todo encaminado".
Finalmente, quien arribó este año al conjunto carioca, procedente del fútbol paraguayo, expresó: "Yo nací en Villa Celina, pero mi madre quedó embarazada allá y un mes antes de tenerme vinieron para Argentina. Yo hice toda mi vida acá, pero mantengo el contacto y en Uruguay tengo a más de la mitad de mi familia, son 21 hermanos, imaginate, y yo me siento uruguayo también".