Sintió el golpe inexistente y lo supo al instante. Esta vez no se dio vuelta para buscar al infractor. Fernando Gago identificó que el destino había vuelto a ser el responsable de una grave lesión en el tendón de Aquiles. Su breve participación en la histórica final de 2018 contra River en Madrid se terminaba así, sin más. Puso en palabras lo que le había pasado y se fue al vestuario. Desilusión absoluta. La misma que sintió cuando vio cómo Sergio Romero detuvo su segundo penal en la serie de cuartos de final de 2023 y dejó a su Racing con un pie afuera. Marcos Rojo sentenció y Gago, ahora director técnico de la Academia y con impecable traje negro, bajó la cabeza y se resignó. Boca, su amado Boca, eliminaba a su equipo. Otra frustración en la Copa. Una más. Pero aguantó la pena y siguió adelante.
En 2025 renueva la ilusión de terminar con su camino de desgracias en la CONMEBOL Libertadores. Gago intenta guiar a Boca Juniors a la gloria y para esos deberá revertir la derrota que sufrió en el partido de ida de la Fase 2 contra Alianza Lima. Este martes 25 de febrero se enfrentarán en La Bombonera y se podrá ver en vivo por Disney+.
La Copa Libertadores es una de las competiciones que no le sonrió a Gago en su trayectoria como jugador y tampoco, en menor medida, como director técnico. La nueva oportunidad que surge como entrenador de Boca se presenta extensa -deberá superar dos instancias previas para acceder a la fase de grupos- y ya comenzó con serias dificultades, aunque volvió con un resultado mejor de lo que indicó el desarrollo del encuentro. El Xeneize tiene un plantel de jerarquía al que 'Pintita' busca administrar para alcanzar el anhelado éxito.
Gago participó de cinco Libertadores como futbolista, cuatro con Boca y una con Vélez Sarsfield. Siempre accedió a enfrentamientos de eliminación directa, pero nunca pudo levantar el trofeo. Sufrió lesiones importantes, decepciones aún mayores y, si bien nunca fue su característica principal, solo convirtió un gol.
Como DT, construyó un Racing vistoso y arrollador en la fase de grupos, remontó una serie de octavos de final que se había presentado cuesta arriba frente a Atlético Nacional y le faltó gol ante Boca en cuartos de final, en una llave en la que mereció más de lo que obtuvo.
En definitiva, al exquisito mediocampista y luego ambicioso director técnico la Copa Libertadores le resultó, hasta hoy, esquiva. Más de una vez se sintió en el sendero adecuado, pero siempre tropezó.
La final de 2018 entre Boca y River en Madrid, la mayor frustración de Gago en la Libertadores
"El fútbol se terminó para mí", les dijo Gago a sus compañeros en el vestuario del Santiago Bernabéu luego de la derrota de Boca por 3-1 contra River en tiempo suplementario en el partido de vuelta de la final de la Libertadores.
Gago sufrió la rotura del tendón de Aquiles del pie derecho a los 116 minutos, cuando Boca perdía 2-1. Se cayó solo mientras intentaba cubrir un pase hacia Julián Álvarez y sintió el mismo dolor que había experimentado ya dos veces. Se levantó como pudo y se retiró del campo de juego sin esperar a los médicos. Sabía perfectamente lo que le había pasado y la impotencia superaba a la bronca y el dolor. Guillermo Barros Schelotto, su entrenador, lo miró incrédulo y comenzó a soltar unas lágrimas. Gago no pudo ni eso.
El gol del Pity Martínez que sentenció el resultado no lo vio: Gago ya estaba en el vestuario imaginando que no volvería a jugar al fútbol. Tampoco volvió al campo de juego para recibir su medalla, ya que el dolor se lo impidió.
La única final de Gago en la Libertadores terminó de la peor manera para él: apenas pudo jugar 39 minutos, se lesionó gravemente y Boca perdió el duelo más recordado de la historia de la competición.
Las participaciones anteriores de Gago en la Libertadores
En 2005, a cuatro días de cumplir 19 años, Gago debutó en la Copa Libertadores en la victoria de Boca 4-0 sobre Pachuca en La Bombonera, por la fase de grupos. Ese fue el único encuentro que el mediocampista central disputó en esa edición.
Aquel equipo dirigido por Jorge 'Chino' Benítez quedó eliminado en cuartos de final contra Chivas de Guadalajara. Gago no fue tenido en cuenta para el partido de ida en México, en el que el Xeneize perdió 4-0 y para el encuentro de vuelta (0-0) estaba convocado a la Selección Argentina Sub 20.
Tras su destacada carrera en el fútbol europeo -pasó por Real Madrid, Roma y Valencia-, Gago volvió al fútbol argentino en 2013 para jugar en Vélez. En la Libertadores disputó los primeros tres partidos de la fase de grupos, luego se lesionó y regresó para el encuentro de vuelta de octavos de final contra Newell's en el que el Vélez de Ricardo Gareca perdió 2-1 como local, tras haber ganado 1-0 en Rosario, y quedó eliminado.
En 2015, ya de regreso en Boca, fue el capitán del equipo de Rodolfo Arruabarrena en los dos primeros partidos de la Libertadores y luego disputó otros dos de la fase de grupos. Y octavos de final volvió a ser el punto final para 'Pintita'. Jugó los dos duelos contra River: la derrota 1-0 en el Monumental y la frustrada revancha suspendida por el gas pimienta que les tiraron a los jugadores del conjunto de Gallardo cuando salían al campo de juego para el segundo tiempo.
Al año siguiente, ya con Guillermo como DT, Gago jugó los seis partidos de Boca en la fase de grupos luego de haberse recuperado de su primera rotura del tendón de Aquiles en el pie izquierdo. El 13 de septiembre de 2015, en el Superclásico en el que el Xeneize venció 1-0 a River en el Monumental, el mediocampista central se lesionó a los 24 segundos del partido.
Y el 24 de abril de 2016, otra vez contra River, pero en La Bombonera, Gago recuperó un balón dentro del área a los 40 minutos del primer tiempo y al pasar cerca de Lucas Alario cayó como si el delantero del Millonario le hubiera dado una patada. No, se había vuelto a romper el tendón de Aquiles. Esa lesión le impidió volver a competir en la Libertadores de ese año en la que Boca quedó eliminado en semifinales ante Independiente del Valle.
En 2018, Gago había jugado cuatro partidos por la Copa antes de la fatídica final de Madrid: uno por la fase de grupos y en los tres duelos como visitante en octavos de final, cuartos de final y semifinales.
El único gol de Gago en la Libertadores, en Boca contra Bolívar
El Boca de Guillermo llegó al cuarto partido de la Libertadores de 2016 con apenas 3 puntos producto de tres empates. El único gol del equipo lo había metido Federico 'Pachi' Carrizo a los 90 minutos del 1-1 contra Bolívar en La Paz.
Un triunfo en la revancha frente al conjunto boliviano, en La Bombonera, se presentaba como una obligación para el Xeneize. Con el encuentro 0-0, a los 33 minutos, Gago recibió una pase de taco de Carlos Tevez, intentó filtrar la pelota en el área, el rebote en un defensor se la devolvió y 'Pinitita' remató de zurda para colocarla junto al palo izquierdo y así abrir el marcador de la victoria por 3-1.
Gago convirtió 10 goles en su carrera y ese fue el único en la Libertadores.
El Racing de Gago en 2023: de la ilusión a la caída contra Boca por penales
Cuando le puso punto final a su carrera como futbolista, el 8 de noviembre de 2020 en Gimnasia 2 - Vélez 2, Gago dijo: "Tuve momentos difíciles, lesiones reiteradas que me afectaron durante estos últimos años, pero que a su vez me enseñaron y me convirtieron en la persona que soy hoy".
Esa persona inició su carrera como director técnico un año después, en Aldosivi de Mar del Plata. Y luego de 8 meses terminó un ciclo con altibajos.
El siguiente paso en su camino como entrenador fue Racing, club en el que estuvo dos años.
En la Libertadores 2023, el Racing de Gago pasó de la ilusión a la frustración: realizó una muy buena fase de grupos en la que finalizó primero del A con 13 puntos, con cuatro triunfos, un empate y una derrota. Si bien no pudo vencer a Flamengo en ninguno de los dos enfrentamientos, la Academia dejó la sensación de que podía competir de igual a igual contra cualquiera.
El primer golpe fuerte se lo llevó de Medellín con la derrota por 4-2 frente a Atlético Nacional: perdía 3-0 y estaba perdido en la cancha, descontó con un par de goles de Gonzalo Piovi a los 87 y 94 minutos y sufrió el mazazo a los 95 con el segundo tanto de Maximiliano Cantera en el partido. Sin embargo, en la revancha en Avellaneda, en el estadio Presidente Perón, Racing ganó 3-0 con autoridad con goles de Roger Martínez, Agustín Ojeda y Juan Felipe Aguirre en contra.
El destino puso al Racing de Gago en frente de Boca en cuartos de final. Los dos empates sin goles, primero en La Bombonera y luego en El Cilindro, dejaron a la Academia con sabor a poco. La definición por penales determinó que Boca, con un enorme Sergio Romero, fuera el semifinalista.
"El dolor es grandísimo. ¿Qué nos faltó? Hacer un gol o ganar en los penales, nada más", dijo Gago en la conferencia de prensa posterior a la eliminación. La ausencia de un centrodelantero goleador fue la gran carencia de Racing en esa Libertadores y se fue con las manos vacías.
"Vamos a competir como siempre lo hacemos. Hay que dejar de guiarse solamente por el resultado", agregó Gago aquella noche de cielo cubierto en Avellaneda. Si bien era un intento de superar el mal trago, también era una premisa de su trabajo como entrenador: preparar a sus equipos para competir al máximo.
Gago, como todo Boca, tiene la ilusión de ganar la séptima Copa Libertadores. Lo sueña, pero no lo promete. Sabe que es un camino largo y difícil. Muy difícil. Y desde el inicio sufrió un golpe del que deberá levantarse inmediatamente.