Luis Mejía, golero de Nacional, valoró la victoria ante Bahía en Brasil por el Grupo F de la CONMEBOL Libertadores 2025, donde tuvo una gran actuación. El arquero panameño también dijo cuál fue la atajada más difícil y respaldó al chileno Eduardo Vargas.
En zona mixta y tras el triunfo por 3 a 1 del Bolso en el Arena Fonte Nova por la cuarta fecha de la fase de grupos, Mejía destacó: “Creo que fue un gran triunfo. El equipo viene demostrando cosas muy positivas. Sabemos que el DT (Pablo Peirano) tiene pocos días en el club, pero de a poco le vamos encontrando la vuelta, sabemos a lo que queremos jugar”.
“Es una victoria que nos encamina para seguir peleando en el grupo. Ahora tenemos dos partidos de local (ante Internacional y Atlético Nacional), lo que nos da mucha confianza”, agregó.
Sobre su rendimiento, el arquero que fue protagonista de una sensacional triple atajada dijo: “Uno trabaja, a veces le pueden salir bien las cosas, a veces no. Soy muy autocrítico y me baso en el trabajo del día a día. Tengo a Leo Romay que siempre está en las buenas y en las malas; estuve tranquilo, al jugar esta clase de partidos y más en Brasil tenés que hacer un partido casi perfecto”.
“En lo personal, me sentí bien. Y el grupo hizo el partido que tenía que hacer, por eso logramos los tres puntos”, afirmó.
Respecto a la jugada más complicada, Mejía señaló: “Me quedo con la que le salgo a achicar a Erick Pulga en el primer tiempo, donde la pelota me pega en la cara. Fue complicada esa, y creo que leí muy bien la jugada. Tuve mucho trabajo y lo importante es que me sentí bien, y que el grupo hizo un partido sólido”.
“En el gol de ellos, desajustamos un poco y nos convirtieron, pero en líneas generales hicimos un partido completo y por eso nos llevamos los tres puntos”, remarcó.
Por último, se le preguntó a Mejía por qué decidió el pasado fin de semana ante Cerro cruzar toda la cancha para saludar al chileno Vargas y felicitarlo por su gol en el Bolso: “Uno convive día a día con él y sabemos la clase de jugador que es, un clase A. No se le venía dando el gol, pero también tenemos que entender que viene a un fútbol totalmente diferente. La adaptación es complicada, pero lo vemos en el día a día, sabemos la clase de jugador que es y el gol se le iba a dar en cualquier momento”.