Luis Suárez salió desde el banquillo, pero no pudo evitar la eliminación de Nacional ante el Atlético-GO en la Copa Sudamericana
El 'Pistolero' hizo muchos gestos durante el partido en Serra Dourada, dentro y fuera del campo. Las quejas tras los goles encajados fueron registradas por la transmisión oficial.
Ya en el once inicial, el camiseta 9 volvió a mostrar su descontento por el último gol de su homónimo rojiblanco.
Sobre el césped, Luis Suárez tuvo dos ocasiones de gol, pero no pudo concretar ninguna de las oportunidades. Los ánimos se calentaron al final del partido con los jugadores del Nacional reaccionado a las provocaciones de los futbolistas del Atlético y Luisito no se quedó atrás.
En un disparo cerca de la línea de banda en la línea del medio campo, el delantero se fue derribado y se quejó con el árbitro asistente. Fue la señal para que la afición del Dragón se metiera con el charrúa.
Por su parte, Luiz Fernando intentaba mantener el balón en el campo de ataque para dejar correr el tiempo. Sin embargo, el camiseta 18 se embarcó en una provocación uruguaya, levantó demasiado el brazo y golpeó en la cara a un rival.
El ariete se ganó la tarjeta roja y se perderá la semifinal de la Copa Sudamericana contra Ceará o São Paulo. En la zona mixta, Luiz Fernando pidió disculpas al público.
Mientras tanto, Luis Suárez entró en silencio y se fue en silencio. El experimentado uruguayo no se pronunció en la zona mixta. Con la mirada al suelo, Suárez subió al autobús y no respondió a las solicitudes de fotos de algunos fanáticos fuera de Serra Dourada.