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"Si muriese hoy, moriría feliz", dijo hace seis días Caio Júnior

Getty Images

CHAPECÓ, SANTA CATARINA, BRASIL -- El pasado 23 de noviembre, el director técnico del Chapecoense, Caio Júnior, estaba tan feliz por haber derrotado al San Lorenzo en la Semifinal de la Copa Sudamericana, que soltó una frase que hoy retumba por lo sucedido: “Si muriese hoy, moriría feliz”, dijo aquella noche de miércoles.

Tan solo seis días antes del trágico accidente aéreo que le quitaría la vida a él y a 75 personas. Hoy, la frase provoca escalofríos. Las palabras recorren las redes sociales y conmueve por la sinceridad de la felicidad que transmitía Caio.

El extécnico de Palmeiras, Grémio y Flamengo está entre las 76 víctimas mortales del vuelo de Lamia. En el vuelo se trasladaba su equipo para disputar la final de esa copa ante Atlético Nacional de Medellín. La carrera de Caio estaba en ascenso.

Además de comandar planteles de jerarquía del fútbol brasileño. Ahora estaba haciendo historia con el humilde Chapecoense, club pequeño del sur de Brasil.

Los pupilos del entrenador Caio Júnior se caracterizaban por un carácter aguerrido, el mismo de su grada, y sus armas más fuertes eran la velocidad de Ananías en ataque, el acierto goleador de Bruno Rangel y, sobre todo, la experiencia del volante Cléber Santana, de 35 años, conocido por su paso por el Atlético de Madrid y el Mallorca.