El polémico caso de Alexander Bolaños, futbolista de Independiente del Valle, ha generado un nuevo dilema en el fútbol ecuatoriano: la Comisión Disciplinaria de la FEF ha decidido suspender por tres años al jugador por falsificación de identidad.
Meses atrás, Genaro Huacón, supuesto representante del ecuatoriano, había revelado que el jugador falsificó sus documentos y que su verdadero nombre era Romario, todo por realizar un cambio de equipo en el año 2012. Esto prendió las alarmas y generó varios conflictos entre Huacón y directivos de Independiente del Valle, que igual tomaron las medidas ante esta circunstancia.
Vale mencionar que cuando la Federación Ecuatoriana de Fútbol empezó su investigación por Alexander Bolaños, el equipo rayado decidió separar al tricolor de las actividades y por tal motivo el delantero no tuvo participación en el tramo final del primer semestre.
La Comisión Disciplinaria de la FEF por medio de su artículo 220 estableció lo siguiente: "Declara autor directo de la infracción citada y se le impone la sanción de tres años de suspensión para ejercer una o cualquier otra actividad o función relacionada con el fútbol. Hágase conocer esta sanción al departamento de COMET de la Federación Ecuatoriana de Fútbol para que en mérito de esta sanción se elimine del sistema la inscripción de Alexander David Bolaños Casierra, y para que durante los tres años que dure la suspensión antes citada no pueda inscribirse en la Federación Ecuatoriana de Futbol a Jancer Romario Bolaños Casierra. Notifíquese y Cúmplase".
Romario Bolaños en realidad nació el 23 de mayo de 1994, es decir que tiene 30 años y no 24 como se hacía pasar. La denuncia de Genero Huacón terminó siendo real y la Federación Ecuatoriano de Fútbol le impuso una sanción de 3 años de suspensión de cualquier actividad relacionada al rey de los deportes.
Un polémico caso para el deporte ecuatoriano, y ahora será ver que dirá su actual equipo, Independiente del Valle, que evidentemente junto al resto de clubes donde Romario Bolaños pasó, desconocían la adulteración de documentos por parte del ariete tricolor.