BARCELONA -- El Barcelona no sabe “nada” de Ousmane Dembélé desde hace semanas y considera “muy improbable” reconducir su situación en el club, aseguró una fuente del mismo a ESPN.
A pesar de la anunciada conversación del futbolista francés con Xavi Hernández en la que le habría trasladado su deseo de renovar (no desmentida por la misma fuente), la única opción que habría para confirmar esta continuidad pasaría por una drástica reducción de su salario, algo que se sospecha no entra en los planes del francés.
El Barça no espera a Ousmane, ni ha pensado comunicarse con él ni, tampoco, se plantea reabrir las conversaciones con su agente.
Hace varias semanas que considera el caso cerrado y solamente variaría el escenario si fuera el jugador, o su representante, quien llamara directamente al club expresando sus intenciones y aceptando rebajarse, y no poco, su salario.
A una semana de acabar contrato, Dembélé asegura no haber firmado por ningún otro club, por más que ha sido relacionado repetidamente con Paris Saint-Germain y Chelsea, y en un video publicado en la red por un aficionado en París el propio jugador expresó sentirse “muy bien en Barcelona”, insinuando de manera clara que su primera opción seguiría siendo renovar el contrato.
El Barça, a pesar de que Xavi es su principal valedor, no tiene intención de variar ni un ápice la última propuesta que le remitió durante la reunión que mantuvo Mateu Alemany con su representante Moussa Sissoko en abril, en la que el director de futbol azulgrana, que en enero tras no aceptar la oferta anterior le invitó a buscarse un nuevo equipo de forma inmediata, hizo un último esfuerzo para acercar posturas, encontrándose con la negativa del agente galo.
Si en los últimos dos meses y medio Sissoko no se ha comunicado con el club, desde el Camp Nou se entiende que es por mantener inalterables sus exigencias económicas, algo que ni se plantea el Barcelona a pesar de que hay quien sospecha que en realidad las propuestas que puede tener sobre la mesa el representante no alcanzan tampoco sus pretensiones económicas, incluso teniendo en cuenta que al ser un agente libre cobraría una prima de fichaje, que en el caso de renovar se dividiría en el tiempo que durara el nuevo contrato.
Sin embargo el Barça no está dispuesto a convertirse en un simple actor secundario, o plato de segunda mesa, en esta suerte de novela por entregas en que se ha convertido el futuro de Dembélé y tiene claro que el 1 de julio, una vez haya acabado el contrato del delantero, la oferta que aún mantiene se retirará.