Llegó la hora del debut. Julián Álvarez, campeón del mundo y flamante refuerzo de Atlético de Madrid, ingresó en la primera fecha de LaLiga, de visitante ante Villarreal. El partido terminó empatado 2-2 y Diego Simeone incluyó al delantero a los 32 minutos de la segunda etapa, ya con ese resultado.
La Araña, que dejó Manchester City para sumarse al Colchonero a cambio de 75 millones de euros más 20 millones en variables, tuvo su debut y fue de visitante. Se incorporó a la lista de argentinos comandados por Simeone y se convirtió en uno de los pases más caros del mercado.
El delantero de 24 años ganó todo con el conjunto inglés pero nunca pudo ser una fija en el once ideal de Guardiola, debido a la presencia de Erling Haland y buscaba un nuevo club para tener mayor continuidad. Con Pep Guardiola hizo seis goles y logró seis títulos en 103 partidos, durante dos temporadas.
"Sentía que necesitaba un cambio en mi carrera, buscar un nuevo desafío, siento que es un club en el que me brindan las herramientas y el espacio para lograr mi mejor versión”, dijo Julián. "Me gustaría jugar... siempre estoy a disposición para cualquier posición. Durante toda mi carrera jugué en distintas posiciones. Mientras este adentro de la cancha y pueda jugar voy a estar feliz", declaró el ex-River al sumarse al Atleti.
El Submarino Amarillo golpeó primero en La Cerámica: a los 18 minutos, el neerlandés Arnaut Danjuma, asistido por el arquero Diego Conde en velocidad con un pelotazo largo, puso el 1-0 en casa. Ya a los 20 marcó la igualdad Marcos Llorente para el equipo de la capital española. A los 37, en contra, Koke decretó el 2-1 en favor de Villarreal y lo empató en tiempo extra el noruego Alexander Sorloth.
Cinco argentinos comenzaron este encuentro en el banco de suplentes de Atlético de Madrid: a Julián Álvarez se les sumaron Ángel Correa, Nahuel Molina, Rodrigo De Paul (habitual titular) y Giuliano Simeone, hijo del entrenador. Álvarez, Correa, Molina y De Paul ingresaron en el segundo período.
El esperado debut de Julián se hizo realidad a los 77 minutos, es decir, los 32 del segundo tiempo, cuando Simeone lo puso en cancha para sacar al francés Antoine Griezmann, rival del argentino en la final del Mundial de Qatar 2022.
Con apenas 18 minutos de juego, incluyendo cinco extras que otorgó el árbitro, Julián pudo hacer muy poco. Formó dupla en la ofensiva del Atlético de Madrid con Correa, pero le faltó más tiempo para poder demostrar sus condiciones. Tuvo tres acciones con pelota, acertó los dos pases que intentó y además cometió dos infracciones.
Simeone fue claro, previo al encuentro: "Fue todo muy rápido. Llegó hace muy poquito. Creo que lleva cuatro entrenamientos, no creo que más. Se está adaptando. Jugó la Copa América y los Juegos Olímpicos, tuvo poco descanso. En estos últimos 10 días de vacaciones, no fueron vacaciones puras porque estuvo pendiente de si se quedaba en el City o venía con nosotros, las charlas no te dejan terminar de relajarte del todo".
Y el DT agregó: "Lo veo bien, sabiendo el lugar que tiene y entendiendo el lugar donde viene. Todas las características que tiene se acercan al ADN de Atlético de Madrid. Todos esperamos con expectativa su rendimiento. Esto no es una responsabilidad, pero sí se ha ganado un lugar importante y ojalá podamos formar un equipo grupalmente para que sus características nos ayuden".