Austria le ganó 3-1 a Polonia en el Olympiastadion de Berlín y dio un importante paso pensando en la clasificación a los octavos de final de la Eurocopa, que no tendrán a su rival de turno.
Con Robert Lewandowski en el banco por su lesión muscular en la preparación para el certamen continental, el equipo de Michel Probierz, que venía de perder sobre la hora con Países Bajos en el debut, apostó por Krzysztof Piatek y Adam Buksa en la delantera para un duelo con un importante valor histórico, por los contendientes y por la sede.
Pero el protagonista, desde el inicio, fue el conjunto dirigido por el alemán Ralf Rangnick, que en el estreno había caído por la mínima frente a Francia. Los austríacos, ordenados, golpearon a los 9 minutos, con un cabezazo de Gernot Trauner tras un segundo centro de Philipp Mwene, convirtiendo a esta fase de grupos de la Eurocopa en récord: ya es la de más goles en el primer cuarto de hora (9).
Austria siguió dominando, aun sin generar tanto peligro (el arquero Wojciech Szczesny tuvo una participación), pero con el correr de los minutos, ante la obligación de revertir el resultado adverso, Polonia luchó y llegó al empate, por intermedio de Piatek, que aprovechó un rebote en el área para estampar el 1-1 (30').
El dominio de los pupilos de Rangnick no había sido abrumador, pero sí había hecho méritos para conseguir un triunfo fundamental. Este resultado no le servía a ninguna de las dos, y en el complemento un equipo fue el que buscó la victoria y lo plasmó en el resultado, de la mano de los cambios del DT.
Previamente, a la hora de juego, Probierz mandó a la cancha a Lewandowski, que recibió la cinta de capitán de Piotr Zielinski, pero Tito poco pudo hacer. Fijo en el área, donde más cómodo se siente, casi no entró en contacto con el balón. Fue amonestado por una disputa aérea y poco más.
Alexander Prass, recién ingresado, se filtró y jugó con Marko Arnautovic, que la dejó pasar y le dejó el balón a Christoph Baumgartner, quien con una gran definición volvió a adelantar a Austria (66'). Y a los 78 minutos, con más espacios, Marcel Sabitzer durmió a la defensa y se fue mano a mano con Szczesny, quien lo bajó y le cometió penal: Arnautovic lo cambió por gol y le puso la daga al encuentro.
En los minutos finales, Polonia careció de ideas y fútbol para descontar, y de hecho Austria contó con un par de situaciones clarísimas para convertir la victoria en goleada. Pero finalmente fue 3 a 1, un resultado que dejó a los polacos al borde del abismo, del que cayeron con el empate entre Francia y Países Bajos- y a los austríacos con buenas chances de cara a la última fecha, para avanzar al menos como uno de los mejores terceros.
La tercera se disputará el próximo martes 25 de junio, con los siguientes partidos: Países Bajos vs. Austria y Francia vs. Polonia. Como neerlandeses y galos empataron 0-0 en Leipzig, Polonia se quedó sin chances matemáticas de avanzar a octavos de final, ya que en puntaje solo puede igualar a Austria, que le ganó el duelo mano a mano, primer criterio de desempate.