El nigeriano Terem Moffi logró este viernes en el Parque de los Príncipes lo que pocos han conseguido: eclipsar con su actuación al mismísimo Kylian Mbappe. Con un rendimiento extraordinario, que incluyó dos goles y una asistencia, el africano fue una pesadilla para París Saint Germain y el gran artífice del triunfo 3-2 de su equipo.
Moffi tuvo una actuación consagratoria. Cada vez que agarró la pelota, hubo aroma a gol para Niza, un equipo construido en base a dos pilares: un contraataque muy aceitado y una entrenadísima presión alta guardada para determinados momentos.
El nigeriano avisó a los 9 minutos, con un ataque sobre la izquierda que terminó en remate al primer palo. Tapó Gianluigi Donnarumma pero fue el preludio de lo que vendría.
La segunda no la dejó pasar. Presión alta de Niza que terminó generando una pérdida de Mbappe. Pase al corazón del área para Jean-Clair Todibo, que enseguida le pegó al arco, pero la pelota rebotó en un defensor y le quedó a Moffi, que remató al palo derecho, con la suerte de que el balón tocó en Lucas Hernández y descolocó a Donnarumma.
Si desde el inicio el visitante estaba parado de contraataque, con la ventaja esa tendencia se acentuó.
Enseguida llegó el empate de Mbappe, pero al conjunto de Luis Enrique se lo notaba incómodo en la cancha. Niza marcaba bien y siempre amenazaba con la contra.
El segundo tiempo comenzó favorable a la visita, siempre gracias a Moffi, que a los 53 armó un jugadón sobre la izquierda: primero lo bailó a Danilo, lo desparramó con un amague y, al borde de la línea final, tiró un centro perfecto que Gaetan Laborde conectó de aire con el pie. Golazo.
Agrandado, Niza fue por más y lastimó a PSG.
A los 68, otra vez Moffi generó el peligro. En una oda al contraataque, la agarró sobre la derecha y cortó hacia el medio. Primero dejó en ridículo a Hernández a puro amague, después hizo lo mismo con Milan Skriniar y la colocó abajo, pegada al palo cruzado, imposible para Donnarumma.
Sobre el final llegaría un golazo de tijera de Mbappe, junto con el marroquí Achraf Hakimi los únicos que sacaron la cara por el conjunto parisino, pero no alcanzaría ni siquiera para rescatar un empate.
Moffi, el nombre a seguir en la Ligue 1.