Los días pasan y las consecuencias que causa el coronavirus continúan afectando al gremio del fútbol en Guatemala, que desde hace un mes se vio obligado a suspender toda actividad deportiva por disposiciones gubernamentales. Uno de los sectores más afectados es el fútbol playa, donde mayoría de los jugadores pertenecen a las localidades de Hawaii, Sipacate y Monterrico, sin poder laborar como pescadores para llevar el sustento diario a casa.
En entrevista con ESPN, el jugador Gerberth Solares del equipo Piratas FP de la Liga Nacional de Fútbol Playa, relata los momentos difíciles que atraviesa sin poder cumplir con su labor diaria de pesca que combina con la actividad del fútbol playa durante los fines de semana.
😥 El sufrimiento de los jugadores del fútbol playa nacional 🏖
— ESPN Guatemala (@ESPN_GT) April 14, 2020
"Se han visto afectados por el Toque de queda, ya que la pesca la hacen en horario nocturno y ahora en las últimas semanas no han podido salir".https://t.co/vqwrfEnzma
“Estamos pasando por una situación bastante crítica en todo el sector de la costa. Aparte de dedicarnos al fútbol playa, nuestra labor diaria es la pesca y ahora con el Toque de queda no hemos podido salir, además que no hay comercio en el área para vender el producto”, expresó Solares, quién desde hace cuatro años se involucró al deporte federado y viaja a la capital cada domingo para jugarlo oficialmente.
Con 24 años, Solares se desempeña como cierre dentro del rectángulo de juego. El último partido que disputó con el equipo de Piratas PF fue la semifinal de ida ante Huracán donde ganaron 5-3, pero no han podido completar la serie en el Campo Marte. Junto con Gerberth en el mismo equipo, juega su hermano Edilson y sus tíos Alejandro y Gustavo Solares.
“Sacrificamos nuestro trabajo y cuerpo porque como jugadores de la costa sur, pescamos por la noche y al siguiente día nos toca partido en la capital. Tomamos la camioneta a las cuatro de la mañana que nos transporta a la capital para jugar y por la tarde nos regresamos. Es un gran sacrificio el que hacemos por disfrutar del deporte, pero también tenemos que dejar el alimento en casa para nuestra familia y viajar únicamente con lo indispensable”, agregó Solares.
Una época que representaba mayor demanda para el comercio de la región era la Semana Santa, sin embargo, por disposición del gobierno local, permanecieron cerradas todas las playas, por lo que tampoco pudieron trabajar. “Un día normal de pesca representa Q100.00 al día. Ahora nos hemos mantenido con los ahorros porque no tenemos ingresos fijos”, expresó Gerberth, quién en compañía de dos o tres personas en su lancha, se dedican a pescar con red o anzuelo de lunes a domingo.
“Extrañamos el fútbol playa. Ahora no hemos podido entrenar porque lo hacíamos por la tarde a orilla del mar, pero ahora con el Toque de queda tampoco nos podemos arriesgar”, manifestó Solares, quién se une al llamado del Comité Ejecutivo de la Liga Nacional de Fútbol Playa para la recaudación de víveres en las instalaciones de la Fedefut en zona 15 capitalina.
La Federación Nacional de Fútbol de Guatemala se pronunció este viernes sobre los escenarios para la reanudación de la actividad deportiva si las condiciones sanitarias lo permiten, sin embargo, no se hace ninguna mención sobre posibles escenarios para la Liga Nacional de Fútbol Playa.