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Cruz Azul rescata empate ante Atlas y posterga su lugar en Liguilla

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¿Cruz Azul merecía ganar o Atlas los perdonó? (2:01)

El debate entre los expertos de Futbol Picante luego del empate entre Cementeros y Zorros en la cancha del Ciudad de los Deportes. (2:01)

La Máquina mostró dos versiones, con descuidos defensivos y con su dominio del balón y ataques al rival, lo que le permitieron lograr el empate


Cruz Azul dejó en suspenso su clasificación directa a los cuartos de final del Clausura 2024 con el empate 2-2 contra Atlas en la cancha del Estadio Ciudad de los Deportes. La Máquina se repuso de un 0-2 en contra para sacar el punto que les asegura llegar a la última jornada de la fase regular en la tercera posición.

Desde un inicio, Atlas se dio cuenta que podría hacer daño con la velocidad de Jhon Murillo y Raymundo Fulgencio, en lo que se convirtió en el principal dolor de cabeza de la zaga de Cruz Azul, al menos en el primer tiempo. Al 6’, Erik Lira perdió el balón en una salida ante Mateo García, quien sirvió para el venezolano, pero falló un disparo frente al arco de Kevin Mier, portero que solo se tuvo que recostar a su izquierda para quedarse con el balón en sus manos.

Jhon Murillo, cuatro minutos después, nuevamente sacó a relucir su velocidad para quedarse frente a la portería de Cruz Azul, pero fue derrumbado por Kevin Mier, acción que fue sancionada como penal por Luis Enrique Santander. Eduardo Aguirre tomó el esférico y lo mando a las redes celestes para abrir el marcador.

Con el 0-1 en el electrónico, ante el dominio de Cruz Azul, Atlas decidió recular todavía más para hacer daño con la velocidad de sus extremos, Jhon Murillo por la derecha y Raymundo Fulgencio por el costado izquierdo. Dicha fórmula estuvo cerca de rendir frutos al 30’. El futbolista mexicano mandó un trazo largo para el venezolano, quien se quitó a Kevin Mier fuera del área, pero su disparo salió desviado de la portería celeste.

Al 38’, se combinó un contragolpe de Atlas, ahora con Raymundo Fulgencio y otro error de Erik Lira al tropezar con la finta del futbolista visitante que desencadenó en la asistencia de Mateo García a Ángel Márquez sin marca, jugador que se encargó de hacer el 0-2 con un potente disparo.

Cruz Azul se tardó en reaccionar. A pesar de que fueron los dueños del esférico, no lograron generar opciones de gol en el arco de Camilo Vargas. El primero llegó hasta el 40, a través de un tiro de esquina, y terminó en las redes de Atlas con un testarazo de Ignacio Rivero, el encargado de meter a la Máquina al partido.

Martín Anselmi movió sus piezas para la segunda parte. Sacó a Alexis Gutiérrez para darle juego a Camilo Cándido, quien tuvo como tarea principal ayudar a la marca de Jhon Murillo, la principal salida de Atlas en los contragolpes.

Cruz Azul estuvo cerca de hacer el tanto del empate al 53’. Ignacio Rivero y Uriel Antuna se combinaron en la banda derecha, zona desde la que el mexicano mandó un centro que fue rematado por Ángel Sepúlveda, pero el testarazo del ‘9’ celeste se impactó en el poste ante la mirada de Camilo Vargas.

Apenas dos minutos después, Cruz Azul, en una jugada similar, pero desde la banda izquierda, se volvió a quedar cerca del empate. Ahora fue Ángel Sepúlveda, quien mandó el centro para Rodolfo Rotondi, pero el remate del argentino pasó a centímetros de la portería rojinegra.

Jhon Murillo perdió protagonismo en el partido ante el cansancio y la marca de Camilo Cándido, con lo que Atlas no supo encontrar otros caminos para generar contragolpes peligrosos en el arco de Cruz Azul, incluso el venezolano terminó por ser sustituido.

El futbol y la suerte recompensaron a Cruz Azul al 71’. La Máquina, que se había robado el protagonismo del partido, hizo el tanto del empate con un disparo de Camilo Cándido. El uruguayo intentó mandar un centro, situación por la que Camilo Vargas salió a cortar, pero el balón tomó un efecto y terminó por colarse a las redes celestes.

Tal vez la más clara de todo el partido llegó al 81’, pero fue desaprovechada por Cruz Azul. Uriel Antuna intentó una volea, que finalmente fue centro. El balón se encontró con los botines de Ángel Sepúlveda, quien, a pesar de que ya no había portero, mandó su disparo a un costado de la portería de Camilo Vargas.

Rodolfo Rotondi y Camilo Vargas regalaron las estampa futboleras de la noche. El argentino, al 84', se lanzó de tijera en un remate que se impactó en el poste y, en el tiempo agregado, el portero se lanzó para impedir la caída de su arco con un manotazo izquierdo, en las últimas dos claras del partido.