Las piernas de Messi estaban listas para uno o dos años más en la élite. Su cabeza, no.
Leo eligió la paz y la tranquilidad en los últimos compases de su carrera, con todo y que el físico a sus 35 años —ahora, 36— le demostró en la pasada Copa del Mundo que no ha sufrido merma alguna.
Coqueteó con un posible regreso al Barça siempre y cuando existieran las garantías necesarias para que esto sucediera, mismas que no aparecieron, con lo que adelantó el viaje a Miami.
Empieza una nueva aventura para el mejor futbolista del mundo en una liga envidiable en cuanto a infraestructura y mercadotecnia se refiere, pero subdesarrollada en lo que respecta a la calidad y el nivel futbolístico.
Sin embargo, la presencia de Leo hará crecer no solo al Inter Miami, si no a toda la MLS. Además, estará acompañado de Sergio Busquets, que no es tema menor, pues se trata de uno de los más destacados medios centros de la historia.
A este par de leyendas del Barça se les puede unir Jordi Alba, uno de los mejores socios de Leo y quien todavía tiene cartel en Europa, pues es seleccionado español y capitán de ‘La Furia Roja’.
El Inter Miami está en camino de armar un verdadero ‘Dream Team’ de veteranos, pues aunque no hay nada concreto ni fundamentos para afirmar que se darán las contrataciones, también han sonado como posibilidades nada menos que Andrés Iniesta y Sergio Ramos.
Se vale soñar y lo cierto es que si Beckham perseveró y perseveró hasta convencer a Messi, no sería descabellado que sumara a su excompañero en el Real Madrid y al ‘Fantasmita’ que quiere una nueva aventura para poner fin a su carrera, luego de abandonar el futbol de Japón.
Son tiempos de rumores y habrá que esperar, pero ya lo dijo Pep Guardiola: “ahora todos quieren ir para Miami”… Y cómo no, si el nuevo residente es nada menos que una leyenda y está juntando a sus amigos para levantar al equipo del barrio.