Campeón de la Eurocopa y de la Liga de las Naciones. Participó en dos mundiales con dos selecciones distintas. Recibió el premio de ser considerado el mejor entrenador del mundo. A los portugueses les gusta decir que generó una revolución. Fernando Santos, técnico de la Selección de Portugal, es un hombre con un largo recorrido en el fútbol.
Tras su pasado como futbolista, donde defendió a Benfica, Marítimo y Estoril-Praia, se convirtió en entrenador en este último club en la temporada 1987/88. Santos realizó un trabajo a largo plazo en el referido equipo hasta 1993/94.
De allí pasó al Estrela da Amadora, donde hizo una muy buena campaña que determinó su salto a FC Porto. En el histórico equipo logró un pentacampeonato de Liga.
En el año 2001 armó las valijas y se fue a Grecia donde asumió la conducción técnica de AEK Atenas. Curiosamente, las dificultades financieras del club determinaron que Santos se fuera al rival de la capital griega, el PAE Panathinaikos.
Santos volvió a dirigir en su país en 2003/04 cuando fue designado como entrenador de Sporting Clube de Portugal y tras un nuevo pasaje por el AEK, en 2006 regresó al club que lo vio nacer: Benfica.
Al año siguiente asumió la dirección técnica de PAOK Salónica, desde donde se catapultó a la selección griega clasificando a la Copa del Mundo de Brasil 2014. Santos se alejó del cargo tras la eliminación en octavos de final del referido Mundial.
En setiembre de 2014 fue designado como entrenador de Portugal. Con su país alcanzó la gloria en la Eurocopa de 2016 y en 2018/19 se consagró campeón de la Liga de Naciones. Bajo el mandato de Santos, Portugal clasificó al Mundial de Rusia 2018 donde fue eliminado por Uruguay en octavos de final. Pese a ello, en junio de 2020, la Federación le renovó su contrato hasta el año 2024.
Sus equipos habitualmente juegan un 4-4-2. "Siempre fuimos creativos. Pero la creatividad no la da el entrenador. Eso lo tienen o no lo tienen los jugadores. La creatividad colectiva sí se trabaja. Pero al contrario de los técnicos de club, a nosotros nos cuesta más. En 2016 estaba muy claro que teníamos que sacar provecho de Cristiano, y como Nani estaba a muy buen nivel opté por un 4-4-2 para intentar buscar la profundidad", expresó en una nota con El País de Madrid.
Santos sabe que tiene una clara misión con Portugal. El mundo mira a su equipo de una forma especial. Como se dice en Uruguay, se entiende que siempre le falta el vintén pal peso. El DT lo tiene claro… “Cuando no has ganado nada te aferras a la voluntad, a la fe. Una vez que has ganado, el público te exige volver a ganar. Antes la afición no esperaba tanto como ahora. A los jugadores también les sucede esto. Tenemos que lidiar con esta presión”.