En el cierre de la pretemporada de Inter Miami y por primera vez en la historia, Lionel Messi enfrentará a Newell’s Old Boys. Tendrá enfrente al club de sus amores, donde comenzó a formarse cuando era un niño y del cual es hincha de toda la vida.
Después de 20 años de carrera como profesional, el astro argentino cruzará caminos en cancha contra la Lepra por primera vez, escribiendo un capítulo más de su historia con el club rosarino.
El 30 de marzo de 1994, con apenas seis años, firmó por primera vez la ficha de las infantiles de Newell's. Diez días después, se estrenó con un póker en la victoria 6-0 ante Pablo VI, en su primer recital futbolístico.
En total, según datos de la Asociación Rosarina de Fútbol, fueron 176 partidos y 234 goles, superando la media de un tanto por partido en cada uno de los años que jugó vestido de rojinegro: 40 en 29 en 1994, 36 en 30 en 1995, 36 en 27 en 1996, 40 en 36 en 1997, 27 en 25 en 1998 y 55 en 29 en 1999.
En septiembre del 2000, después de liderar La Máquina 87, una categoría invencible a nivel regional, y de probarse en otros clubes, como River Plate, Leo dejó Newell's y partió rumbo a Barcelona, club que estuvo dispuesto a hacerse cargo de su tratamiento, para incorporarse a La Masía, prestigiosa estructura de fútbol base del elenco catalán. El resto es historia, pero el vínculo de Messi con Newell's no quedó ahí.
Según reconoció en 2023, en una entrevista con Jorge Valdano, tanto él como su familia eran fanáticos de la Lepra: "Todos éramos fanáticos, íbamos a la cancha. Antes de empezar en Newell's, no, porque yo era chiquito, pero a los 7 u 8 años me acuerdo que siempre iba a la platea con mi papá, mis tíos, mis hermanos, si no era un partido complicado, en el que se pudiera armar lío, como los clásicos. Empecé con 8 o 9 años, después empecé a ir con compañeros de fútbol también, que nos dejaban pasar, con algún padre que siempre nos llevaba"
"Yo era chico, pero viví la época de Manso, Terremoto Cejas, Cobelli, Real, Zamora, aunque lo vi poco", completó el 10, que incluso jugando para el Barcelona, en 2005, cuando se encontraba en el país para prepararse para el Mundial Sub 20, visitó el Coloso como hincha, dejando una imagen inédita en su historia.
Además, Messi disputó tres amistosos en el Estadio Marcelo Bielsa: en 2009, en un partido organizado por la Fundación Atlético de Madrid y la Fundación Pupi, de Javier Zanetti, en el que incluso jugó un tiempo con la camiseta del Colchonero; en 2011, antes de la Copa América, en un encuentro entre Los Amigos de Pupi y Los Amigos de Maxi (Rodríguez), en el que anotó un doblete; y en 2023, quizás la más recordada por cercanía, cuando ya siendo campeón del mundo se ganó la ovación de todo el estadio al visitarlo para el partido despedida de Maxi Rodríguez, otro referente del club, y al unísono se le canó "Y Messi tiene leeepra".
Pero uno de sus gestos más recordados para con el club de sus amores tuvo lugar a 10.000 kilómetros de Rosario, precisamente en Barcelona: el 29 de noviembre de 2020, cuatro días después del fallecimiento de Diego Armando Maradona, la Pulga anotó un gol en la goleada ante Osasuna y homenajeó al Pelusa sacándose la camiseta y mostrando una que utilizó en Newell's en 1993.
En esa época, siendo Leo y todavía no Messi para el mundo del fútbol, el chiquito que encantaba a todos en las canchas rosarinas había presenciado el debut del Diego en la Lepra, otro de los vínculos entre los dos más grandes.
"Siempre estuvo la idea de poder disfrutar del fútbol argentino, de jugar en Newell's", le dijo Messi a Migue Granados en 2023. Si se pondrá oficialmente la camiseta rojinegra o no, lo dirá el tiempo. Hoy, con 36 años, disfruta en Inter Miami y atraviesa sus últimos tiempos en la Selección Argentina, después de ganar la Copa América, la Finalissima y el Mundial.
Por lo pronto, a casi tres décadas de su primera firma, en imprenta y en un documento que es patrimonio histórico del fútbol, Lionel Messi compartirá cancha con uno de los clubes de su vida, en el DRV PNK Stadium, en una noche que promete ser muy emotiva.