<
>

El Papa Francisco y el Milagro del San Lorenzo

MÉXICO -- Para muchos el futbol no es una cuestión de gustos sino de devoción donde jugadas son alabadas como actos de un Messí-as, pero quizá nadie viva mayor relación con ambos elementos que Jorge Mario Bergoglio - el Papa Francisco.

Nacido en Buenos Aires, Argentina, donde el mayor llamado a misa llega en forma de un silbato al inicio de un partido, Francisco eligió, en una enorme coincidencia o hasta vaticinio de su futuro, a un equipo cuyo nombre hace alusión directa a una figura religiosa, San Lorenzo, tras ser fundado por un sacerdote del mismo nombre, Lorenzo Massa. Su amor fue tal que asegura que en 1946 acudió a todos los juegos de local del equipo.

Desde 2008 recibió su carnet oficial del equipo con el número 88235N, además de oficiar ese mismo año la misa por el centenario del club. Aprovechando su cercanía con el equipo, solicitó que nunca le quitaran los colores.

"No importamos los colores de otro lado, se los pedimos a la Virgen. Nunca saquen a María Auxiliadora del club porque es su madre, ya que San Lorenzo nació en (el Oratorio) San Antonio bajo la protección de la Virgen", pidió.

Después de su nombramiento como Papa el 13 de marzo de 2013, el club San Lorenzo se jactaba de tener un aliado en el Vaticano que pudiese apoyarlos en momentos oscuros.

En respuesta a las plegarias de los aficionados, en diciembre el equipo puso fin a seis años sin título en el futbol argentino al coronarse en el torneo Inicial, pero el mayor milagro llegó en 2014 cuando ganaron su primera Copa Libertadores al derrotar 2-1 a Nacional de Paraguay.

INSPIRA CON EJEMPLOS DE LA CANCHA

Pese al amor que profesa al deporte, el Papa Francisco ha reconocido en entrevistas que era un “patadura”, por lo que jugaba más al basquetbol, aunque si debía jugar al futbol, tomaba una posición atrás.

Ahora, desde su pontificado, el Papa mantiene viva su pasión por el balompie y lo usa como ejemplo en sus discursos.

"Cuando se suda la camiseta tratando de vivir como cristianos experimentamos a lo grande", dijo en uno de sus sermones en Brasil hace tres años.

"Sean protagonistas, jueguen para adelante, pateen para adelante construyan un mundo mejor", añadió.

Así, a partir de que asumió el Papado, Francisco ha compaginado su devoción a la iglesia con un lenguaje universal como el futbol.