TÚNEZ - La anfitriona Gabón y la debutante Guinea Bissau inauguran mañana en Libreville la XXI edición de la Copa de África de Naciones con un partido en el que los locales deberán superar la presión y la ansiedad que generan jugar en casa y tener que cumplir como favorito.
A priori, los de José Antonio Camacho son muy superiores a los "perros salvajes del desierto", que ya han cumplido con solo clasificarse: tanto por juego como por la calidad de un plantel que lidera el mejor jugador de la Bundesliga la pasada temporada, Pierre Emerick Aubumeyang.
El delantero del Borussia de Dortmund, por el que suspiran algunos de los grandes europeos, está llamado a ser el jugador más decisivo del torneo, título que probablemente se dispute, salvo sorpresa, con el argelino Ryad Mehrez (Leicester) y el senegalés Sadio Mané (Liverpool).
En torno a su espigada y potente figura, el antiguo seleccionador español -que también debuta en la competición- ha dispuesto un equipo técnicamente aseado y estratégicamente trabajado en el que sobresalen jugadores interesantes como el joven centrocampista de la Juventus, Mario Lemina.
Lemina -un hombre de físico poderoso y toque dulce- ha jugado 14 partidos -10 de Liga y 3 de Champions- y marcado un gol con la "Vecchia Signora" desde que este verano llegara a Turín procedente del Olympic de Marsella.
A su lado, destacan igualmente el trabajo en la sala de motores de Levy Madinda, otra joven promesa enrolada en el Gimnastic de Tarragona, de la segunda división española, y de su colega André Biyogo Poko (Karabukspor).
La "columna vertebral" del equipo la apuntala el guardameta del Oostende, Didier Ovono, un veterano de 33 años bregado en la liga belga.
Además de la presión ambiental -en Gabón muchos sueñan a diario ya con el título- y de los nervios naturales del primer partido, "las panteras" deberán superar también el ambiente enrarecido que ha generado el reciente pulso entre el entrenador y la federación -se especuló incluso con una nueva "espantada" de Camacho.
La escasa efectividad de cara al gol que los gaboneses han tenido en los tres últimos partidos, en los que ha empatado a cero con Egipto y Uganda en la fase de clasificación del mundial de Rusia 2018, y a uno con las Islas Comoros en el último encuentro de preparación.
Y la inestabilidad política que atraviesa el país, emanada del desenlace de las elecciones presidenciales del pasado septiembre: muchos se preguntan cual será la reacción del público cuando aparezca en el estadio Ali Bongo, polémico ganador de los comicios e hijo y heredero del hombre que rigió el país durante 40 años.
Enfrente, Guinea Bissau opondrá un equipo integrado básicamente por jugadores que se ganan el pan en la primera y segunda división de Portugal, que gira en torno del jugador del Levadiakos griego Zezinho y que tiene en sus filas hasta un jugador de categoría preferente en España.
Una hora después del partido inaugural, Camerún y Burkina Faso, los otros dos equipos del grupo A- trataran de lograr un buen resultado que les permita cobrar ventaja de cara a una clasificación para cuartos de final que se prevé podría ser muy ajustada.
Los "leones indomables" parecen partir con cierta ventaja pese a que en su lista de convocados priman, sobre todo, las grandes ausencias.
En Gabón no estarán ni Joel Matip (Liverpool) ni Eric Maxim Choupo Moting (Shalke 04); tampoco estarán Allan Nyom, defensa derecho del West Bromwich Albion, y Andre Onana (Ajax), al que se considera heredero de Thomas N'Kono.
Así que el belga Hugo Bross deberá confiar la suerte de la Camerún menos creativa al fino estilete del Beksitas turco, Vincent Aboubakar.
Las dudas de Camerún son el terreno del que Burkina Faso quiere sacar provecho para avanzar hacia la fase eliminatoria y sacarse la espina de la edición de 2013 en Sudáfrica, donde perdió la final (1-0) frente a Nigeria.
El portugués Paolo Duarte mantiene el mismo equipo solidario en torno a hombres de gran experiencia como Charles Kabore (FC Krasnovar) -jugador del torneo en 2013-, Jonathan Pitropia (Al Nasr) y los hermanos Alain Traoré (Karabükspor) y Bertrand Traore (Ajax), uno de los hombres a seguir durante el campeonato.
"Los caballos" demostraron esa solidez durante toda la fase de clasificación pero al igual que otros favoritos, como Argelia y la propia Camerún, han sembrado dudas en los primeros encuentros de la fase previa al mundial de 2018.
Su duelo el pasado octubre frente a Sudáfrica en Ouagadougou, en el que flirtearon con la derrota, fue muy criticado por los medios locales que ahora confían en una victoria inaugural y en el estallido definitivo de Traore para avanzar en un torneo abierto con hasta seis aspirantes.