Brasil contra Argentina, por la final de la Copa Confederaciones 2005, será retomado por TV Globo este domingo a partir de las 4 pm (hora de Brasilia).
Este fue el juego que confirmó la posición de Adriano, quien marcó dos goles el 29 de junio, como uno de los mejores delanteros del futbol mundial en ese momento, si no el mejor.
Y cada brasileño se pregunta cuál podría haber sido el delantero central si no hubiera "abandonado" su carrera después de ganar el Campeonato Brasileño 2009 con su Flamengo de corazón.
Hubo muchos factores que llevaron al ex atleta a dejar el futbol apartir de 2010, incluso perdiendo la oportunidad de competir en la Copa del Mundo en Sudáfrica.
La muerte de su padre, la depresión, la falta de motivación para entrenar... Hay muchas teorías y posibles explicaciones.
Sin embargo, uno de sus amigos más cercanos cuenta otro problema que él cree que siempre tuvo Adriano: el delantero nunca supo (o nunca quiso) lidiar con la fama.
Eso es lo que el ex lateral derecho Cicinho, quien ganó la Copa Confederaciones 2005 y jugó en la Copa Mundial 2006 junto al delantero central, con quien formó una fuerte amistad, además, incluso jugaron juntos en la Roma y vivió en el mismo condominio durante este período.
"Mantengo la amistad y las muchas conversaciones que tuve con Adriano. Él siempre me habló sobre sus experiencias de vida, dónde nació y todo lo que se convirtió. Y también habló sobre la dificultad que tuvo para lidiar con todo eso. Fueron conversaciones muy buenas y siempre fue agradable estar cerca de él", dijo el ex Sao Paulo y el Real Madrid, en una entrevista a ESPN.
Desde el punto de vista de Cicinho, Adriano siempre se vio a sí mismo como "Didico da Vila Cruzeiro", en referencia a la favela en la que nació y creció en Río de Janeiro, y no como el "Emperador", como se le llamó en su época al momento que estuvo en el Inter de Milán entre 2003 y 2007.
"Lo que más me impresionó de Adriano fue el hecho de que pensaba que era un chico normal. Tenía en mente que había nacido en Vila Cruzeiro y se había convertido en el 'Emperador', pero que, en su mente, podía caminar descalzo por la calle. convertirse en Didico", explicó.
"Esta 'capa del Emperador' fue puesta sobre él por la gente, por la prensa, por la multitud... Pero nunca se sintió así. Pensó que era una persona normal", agregó.
Cicinho dice que la estrella no se sintió cómoda en medio de los "reflectores" de la fama, y nunca dejó sus verdaderas raíces.
"No aceptó esta visión de las personas en relación con él. Adriano siempre me dijo que necesitaba estar con sus amigos de la infancia, en la favela donde nació, porque allí solo estaba Didico, un tipo normal entre muchos otros. "Era una necesidad para él estar allí. Siempre vi esta esencia en él", señala.
El ex defensa todavía piensa que Adriano siempre quiso ser un recluso y no quiso destacar su vida personal. "Adriano prefiere estar con sus amigos, con su familia y lejos de las exageraciones. Desde que lo conocí, él es un tipo que quería privacidad. Al salir del campo, no quería que la gente quisiera saber sobre su vida o dar su opinión al respecto”, subraya.
Cicinho termina diciendo que el ex delantero nunca se considerará el ‘Emperador’. "No se ve a sí mismo como 'Emperador', sino como 'Adriano da Vila Cruzeiro'. Quizás ni siquiera tiene la noción de la grandeza de su nombre en Brasil y en el extranjero", teoriza el ex atleta, antes de alabar el apego del amigo de las raíces.
"Dios le dio el regalo de jugar al futbol para sacar a su familia de la favela, pero eso no significa que fuera necesario abandonar a las personas con las que creció. Y nunca lo hizo. A pesar de que lo consideran el 'Emperador', él siempre mantuvo la esencia", observó.
"Decidió vivir así, vive así hasta hoy y creo que es hermoso. Es un tipo que no se vio afectado por la fama. Y eso es digno de todos los elogios", agregó.