Imaginen contar con la capacidad de armar a un futbolista de fantasía, eligiendo los mejores aspectos de las grandes estrellas del balompié mundial para construir al atacante perfecto.
Muchos argumentarían que no se necesita más que combinar las fortalezas de Lionel Messi y Cristiano Ronaldo, para obtener un jugador sin debilidades. Sin embargo, cuando profundizamos en las cualidades que caracterizan a la élite del futbol, incluso Messi y Cristiano son incapaces de igualar algunas de las señas que distinguen a sus rivales.
¿Quién es el mejor cabeceador? ¿Qué jugador cuenta con la mejor zurda o diestra? ¿Quién posee la velocidad más vertiginosa? ¿Qué fortaleza imposibilita que los defensores rivales puedan contenerle?
ESPN ha intentado obtener la respuesta, construyendo el mejor futbolista a partir de las piezas que sirven como tarjeta de presentación de los grandes del balompié.
Cerebro: Lionel Messi
Es obvio que el futbolista perfecto debe ser capaz de evaluar todas las situaciones, tomar la decisión más apropiada con regularidad infalible y contar con aptitudes para cambiar la dirección de una jugada; aparte de dictar el ritmo con su habilidad para leer las situaciones de juego.
Y no existe un jugador en todo el fútbol mundial con un cerebro más astuto que el de Messi. El delantero del Barcelona y la selección de Argentina es todo un genio con el balón a sus pies, bien sea eligiendo el momento correcto para definir y anotar, o haciendo un pase a su compañero capaz de desbordar cualquier defensiva.
Asimismo, el cerebro de Messi también le permite engañar a sus oponentes y controlar el ritmo del partido. El rosarino de 33 años sigue siendo capaz de desarmar a sus oponentes con una precisa ráfaga en el tercio final.
Frecuentemente, los goles de Messi acaparan titulares, pero es su visión y habilidad para dictar el ritmo de juego son producto del intelecto más agudo del balompié mundial.
Cabeza: Cristiano Ronaldo
Olivier Giroud y Harry Kane se merecen menciones honoríficas por sus habilidades para cabecear; no obstante, Cristiano Ronaldo se ubica en un nivel que lo aparta del resto a la hora de marcar goles con la cabeza. No se trata simplemente del poder y el sentido de dirección que Cristiano es capaz de combinar con sus cabezazos; sino que su resorte increíble le permite saltar a alturas mucho mayores que cualquier jugador a su alrededor.
Sólo hay que mirar su gol de cabeza marcado con la camiseta de la Juventus contra la Sampdoria en diciembre de 2019, cuando el delantero portugués registró una altura de 2.56 para conectarse con el centro de Alex Sandro.
Asimismo, Ronaldo convirtió un cabezazo memorable para la causa del Real Madrid en un encuentro contra el Manchester United en febrero de 2013, cuando saltó más alto que Patrice Evra, despachando un espectacular gol de cabeza para desbordar al portero David de Gea en el Santiago Bernabéu.
A la hora de cabecear, nadie lo hace mejor que Cristiano.
Pierna derecha: Kevin De Bryune
En un deporte en el cual los jugadores diestros conforman la inmensa mayoría, ¿cómo elegir al hombre con el pie derecho más potente?
Toni Kroos ha dominado el mediocampo durante una década vistiendo las camisetas del Bayern Munich, Real Madrid y el combinado nacional de Alemania gracias a su repertorio de pases largos; por su parte, Cristiano Ronaldo ha marcado cientos de goles con su diestra prodigiosa.
Sin embargo, a la hora de combinar las habilidades para convertir, generar peligro y hacer la transición de la defensa al ataque, nadie puede igualar los aportes del pie derecho de Kevin De Bruyne.
El mediocampista del Manchester City y la selección de Bélgica se asemeja a un David Beckham de la era moderna con sus envíos desde la banda derecha, registrando 20 asistencias en la pasada temporada y 11 en lo que va del torneo actual.
Adicionalmente, De Bruyne representa una amenaza con sus remates de largo alcance y tiros libres. Por ende, a pesar de que otros jugadores cuentan con diestras con similares capacidades destructivas, ninguno iguala a De Bruyne en lo que respecta a poseer una completa gama de talentos.
Pierna izquierda: Mohamed Salah
Lionel Messi pudo haber liderado la presente categoría; por su parte, Gareth Bale cuenta con argumentos para imponerse, gracias al poder y elegancia que ha logrado combinar con su zurda.
Sin embargo, el delantero del Liverpool Mohamed Salah fue bendecido con las habilidades artísticas y el regate de Messi junto con el poder de Bale, aparte de contar con la aptitud adicional para amortiguar y manipular el balón.
Salah ha demostrado durante su paso por el Liverpool que es capaz de marcar toda clase de goles con su pie izquierdo: su remate contra el Chelsea en abril de 2019 destacó su poderío; convirtiendo también un sorprendente tanto contra la Roma en la semifinal de la edición 2019 de Champions League. Adicionalmente, Salah hizo gala de sus habilidades en la definición con un toque que rodeó a Ederson para desbordar a Nicolás Otamendi en la victoria de su equipo sobre el Manchester City en cuartos de final en el Etihad Stadium.
Cuando el balón cae en el pie izquierdo de Salah y éste tiene vista hacia el arco, el internacional de la selección de Egipto es uno de los más peligrosos del planeta.
Velocidad: Kylian Mbappé
El fútbol está lleno de jugadores bendecidos con ritmo increíble; sin embargo, la habilidad para desbordar a los rivales sólo es verdaderamente devastadora cuando el jugador es capaz de despachar un toque definidor, bien sea para marcar gol o hacer un pase clave.
Marcus Rashford cuenta con ese ritmo; sin embargo, el delantero del Manchester United aún no ha logrado desarrollar la crueldad que Kylian Mbappé ha sido capaz de compaginar con su velocidad sobre el césped. Mbappé siempre ha sido una máquina voladora, consolidándose como uno de los mejores delanteros de la Champions League desde su irrupción en el escenario con 19 años, vistiendo la camiseta del AS Mónaco en 2017.
Su ritmo y producción goleadora fueron cruciales para el triunfo de la selección de Francia en el Mundial de Rusia 2018 y sigue siendo el artillero más potente del Paris Saint-Germain, a pesar de contar con la presencia del delantero brasileño Neymar en el Parc des Princes.
Mbappé es el ejemplo perfecto de cómo el ritmo puede ser sumamente destructivo cuando se suma a un agudo toque para definir.
Fuerza: Erling Haaland
Un delantero puede contar con una multitud de talentos; pero si éste no tiene la fortaleza suficiente para eludir los retos físicos de los defensores, sus cualidades no le llevarán muy lejos.
A pesar de lo anterior, la falta de fortaleza física nunca será problema para Erling Haaland. De hecho, el artillero del Borussia Dortmund y la selección de Noruega comienza a reescribir el reglamento de los mejores centrodelanteros del mundo.
Con apenas 20 años, Haaland ya cuenta con un físico imponente y 1.94 metros de estatura, mucho más espigado que rivales de la talla de Robert Lewandowski (1.85m) y Harry Kane (1.88m). Los defensores rivales sienten escalofríos al pensar que el jugador que vistió en su adolescencia la camiseta del FC Salzburgo sigue creciendo.
Y esa realidad se hace evidente cuando vemos a Haaland en acción. Hace dieciocho meses, el noruego irrumpió en el escenario con el Salzburgo siendo un adolescente desgarbado. Pero con el Dortmund, es evidente que ha ganado estatura y masa muscular.
Cuando Haaland se encuentra en su mejor nivel, su velocidad y fortaleza se hacen indetenibles. Es apenas ahora que aprende cómo hacer que sus rivales reboten mientras irrumpe en dirección al arco contrario.
Movimiento: Robert Lewandowski
El arte de escapar de los defensores y crear espacios es componente clave para los mejores artilleros del mundo. Figuras tales como Sergio “Kun” Agüero y Edinson Cavani han disfrutado de largas y fructíferas trayectorias gracias a sus movimientos en el tercio final.
Sin embargo, nadie se mueve mejor que la figura del Bayern Múnich Robert Lewandowski quien, a pesar de tener 32 años, sigue siendo capaz de desbordar a los defensores mejor que nadie con un ligero movimiento o paso en falso en el punto penal.
El internacional de la selección de Polonia se repliega y atrae a los defensores contrarios a lo ancho del área contraria, moviéndose constantemente con el fin de agotar la energía y niveles de concentración de quien le marca.
Adicionalmente, Lewandowski cuenta con la fortaleza física y ética de trabajo necesarias para todos los delanteros de élite, siendo capaz de cabecear el balón como los mejores.
No obstante, la principal cualidad de Lewandowski es su movimiento, y esa es la razón por la que sigue siendo el artillero número 1 del plantel del Bayern.