FRANKFURT -- Xavi Hernández, entrenador del Barcelona, se mostró "contento" por el momento del equipo, que mañana visita al Eintracht Frankfurt en la Europa League, pero avisó que "es una montaña rusa. Hay momentos de máxima alegría y otros de máxima pena y es difícil de gestionar, hay que estar preparado para ello. Esto es el Barça y hay momentos que los disfruto y otros que los sufro, pero eso ya lo conozco desde mi época de jugador".
Por ello dejó claro que ante el partido del Eintracht "no valdrá nada de lo hecho hasta ahora y no podremos relajarnos en ningún momento. Siempre es mejor el elogio que la crítica, claro, y aunque estoy contento de cómo van las cosas, eso puede cambiar y tenemos que ser conscientes. Nada nos debe confundir ni dejar de ser humildes".
"Hemos tenido mala suerte con el Eintracht”, repitió Xavi hasta en tres ocasiones, explicando que el equipo germano, ante el que se estrenará el Barça este jueves "es fuerte y aunque algo desconocido en España, ya ha sido capaz de eliminar al Betis, poner el problemas al Bayern... Físicamente es fuerte y si no estamos a su altura en cuanto a intensidad nos puede pasar por encima".
"Hay que minimizar riesgos, no perder balones en la zona de construcción y limitar al máximo las transiciones del Eintracht”, resumió el técnico azulgrana, que huyó de cualquier consideración de favorito en el torneo: "No podemos pensar más allá que en el Eintracht. Nos ocupa el presente y el presente es el partido de mañana... Y ya he dicho que no hemos tenido precisamente suerte en el sorteo".
PRESIÓN A DEMBÉLÉ
Xavi Hernández se sonrió cuando le explicaron en la sala de prensa que Ferran Torres, en tono de broma, afirmó que a Ousmane Dembélé "lo secuestraría en Barcelona para que se quedara en el Barça". Xavi sonrió, sí, pero en su discurso referido al delantero francés mantuvo la firmeza que ha ido mostrando en las últimas semanas. "No tenemos la mejor situación financiera en el club y hay que ajustarse un poco... Pero ojalá se quede porque es fundamental para nosotros".
El entrenador del Barcelona se mostró "muy contento" por la decisión de Ronald Araújo de aceptar la oferta para renovar, revelando que "no estará mejor en ningún otro sitio; si ha decidido quedarse es de agradecer por parte del club y acertada por él" y no desaprovechó la ocasión de trasladar todo tipo de presión hacia el entorno de Dembélé... Y también hacia el club, dando cuenta de manera inequívoca que el delantero no se discute en sus planes.
"Esto es una negociación, como ocurre con Gavi, con Sergi Roberto, como aún con Araújo... Aquí juegan el club, los asesores, los jugadores y en el caso de Ousmane el club sabe qué pienso: Dembélé es un jugador como hay pocos”, sentenció, sin querer ponerse una fecha límite para resolver la situación.
"Yo solo puedo hablar desde noviembre y desde entonces él es ejemplar en todos los sentidos. Su actitud, su implicación, su motivación... Se le ve contento y feliz, a gusto y siendo un futbolista diferencial”, sintetizó Xavi, indiscutible defensor de la permanencia de Dembélé en el club.