Los dos penales que se cobraron en el partido que Rampla Juniors y Nacional disputaron en el Estadio Centenario, marcaron las acciones más polémicas de la novena fecha del Torneo Clausura. El cierre del encuentro que disputaron picapiedras y tricolores en el Centenario fue a pura adrenalina. A siete minutos del final, y cuando Nacional cargaba en procura del empate, el árbitro Javier Burgos cobró un penal a favor del equipo de Martín Lasarte. Lozano intentó tirar un centro desde la derecha y la pelota pegó en el codo de Tomás Adoryán. Burgos no dudó y sancionó penal. En ese instante se pudo ver al capitán de Rampla, Diego Arismendi, protestando ante el árbitro al cual le dijo: “No podés cobrar ese penal”. Cuando se jugaban los primeros minutos de adición Gustavo Machado asistió a Tomás Adoryán que, cuando se disponía a definir, fue derribado en el área por el golero de Nacional, Luis Mejía. El árbitro Burgos no dudó y sancionó penal para Rampla. La ejecución se demoró más de la cuenta porque el VAR revisó la acción desde su inicio por un posible fuera de juego que era lo que reclamaban los jugadores de Nacional. A través del videoarbitraje se comprobó que la decisión había sido correcta y Núñez transformó el penal en gol para darle el triunfo a Rampla. En la visita de Danubio a Cerro Largo se generó una polémica por la expulsión del delantero de la franja, Nicolás Blandi. Sobre los 38 minutos de juego el argentino que defiende a Danubio fue a disputar una pelota con su compatriota Alan Di Pippa que cayó fulminado en la cancha. El árbitro Gustavo Tejera no dudó en mostrarle la roja, con claros gestos de que Blandi le había pegado con el codo a Di Pippa. El delantero de Danubio se molestó y protestó por entender que no había tocado al jugador de Cerro Largo.