Ben Youngs, que con 127 caps es el jugador con más presencias en Inglaterra, contó que debió someterse a una operación de corazón tras desplomarse en una práctica de Leicester Tigers.
A los 34 años y retirado del rugby internacional luego de lograr el tercer puesto de la Copa del Mundo 2023 frente a Los Pumas, el histórico medio scrum reveló que tuvo que ser intervenido a una cirugía y que fue diagnosticado de dos enfermedades.
En su reaparición en un podcast que lleva adelante con Dan Cole, Youngs contó que padecía arritmia y taquicardia supraventricular. Tras el susto, ha sido sometido a una operación de dos horas que le permitirá continuar con su carrera.
"Me estoy recuperando. ¿Recuerdan cuando bromeamos en el pod hace un tiempo y tuvimos esta práctica abierta en Leicester y dije que básicamente me derrumbé? Bueno, no me derrumbé, pero tuve que parar y tumbarme porque el corazón me latía con fuerza y la lluvia me golpeaba en la cara. Giré la cabeza hacia un lado y miré a todos los fans en la tribuna principal de Leicester y pensé: 'así es como me voy a ir'. Básicamente tuve algunos de estos episodios y los he tenido toda mi vida. Y puede ocurrir espontáneamente en cualquier etapa de tu vida o carrera. Y así lo he tenido toda mi vida, desconocido para mí", comenzó el medio scrum.
"He tenido un par de episodios a lo largo de mi carrera, pero siempre me han hecho revisiones y he recibido la mejor atención médica. El club se ha portado de maravilla, como suele ocurrir en estos casos. Me examinaron la primera vez que me pasó y la segunda", agregó el compañero de Julián Montoya, que ahora es dirigido por Michael Cheika.
A Youngs se le ha colocado un dispositivo de monitorización en el pecho, con un enlace de comunicaciones con el hospital. El jugador de 34 años sufrió otro incidente cuando corría en una cinta y su ritmo cardíaco se elevó a algo más de 200 pulsaciones por minuto.
"Dejando a un lado el rugby, probablemente sea algo bueno. Ahora ya se ha detectado, pero imagina que dentro de 10 años estás jugando en familia con los niños o los nietos y pasa algo así. Es como si cundiera el pánico, mientras que nosotros tenemos la suerte de estar expuestos a buenos médicos y ahora se puede considerar un problema de salud a largo plazo", concluyó Youngs.