En medio de la crisis que azota Gales, el diputado Stephen Kinnock pidió a la Unión de Rugby de Gales (WRU) que reanude las negociaciones con Ospreys y Scarlets después de la emisión del Acuerdo de Rugby Profesional (PRA25). Todo el rugby, en Disney+.
El rugby en Gales está al borde de una "guerra civil" luego de que los dos clubes no cumplieran con el plazo para acordar el nuevo PRA25, lo que resultó en que la WRU pusiera un período de notificación de dos años sobre el acuerdo actual. Tal como está la situación, la entidad madre galesa instalará un modelo de financiación de dos niveles cuando el acuerdo actual expire en 2027, con Cardiff y los Dragons recibiendo £6,5 millones, mientras que Ospreys y Scarlets solo recibirían £4,5 millones. Estos últimos revelaron que no firmaron el acuerdo debido a la adquisición del club de la capital por parte del organismo rector luego de su administración.
En una declaración publicada en X, Kinnock, el diputado por Aberafan Maesteg, dijo: “El viernes (23 de mayo) nos reunimos como grupo de diputados con el presidente y director ejecutivo del grupo de la Unión de Rugby de Gales (WRU) para discutir nuestras preocupaciones sobre los recientes acontecimientos en torno al Acuerdo de Rugby Profesional como representantes de los distritos electorales vinculados con las regiones de Ospreys y Scarlets. Tanto Ospreys como Scarlets se habían comprometido a firmar el nuevo PRA antes del colapso de Cardiff Rugby y su posterior rescate por la WRU. Tras este evento, los clubes solicitaron garantías de equidad e igualdad para todos los clubes. Estas solicitudes no buscaban obtener una ventaja para sí mismos, sino contribuir a un futuro positivo para todo el rugby galés".
Además, agregó: "El rugby es fundamental para nuestras comunidades, no solo a nivel profesional, sino también en escuelas, clubes locales y bases de todo el país. Los clubes profesionales de Gales comprenden su papel fundamental en el apoyo al ecosistema del rugby, así como al tejido social y económico de las comunidades galesas. El rugby es un deporte que se basa en el respeto. Es imperativo que la WRU trate a cada uno de los clubes profesionales de Gales con respeto y equidad, y que ningún club obtenga una ventaja a expensas de los demás. Sin nuestros clubes profesionales, todos —escuelas, clubes de rugby locales y la comunidad en general— sufren. La incertidumbre que han causado las acciones y anuncios de la WRU está provocando una mayor desestabilización del rugby galés y todo lo que depende de él. Ambos clubes nos han asegurado que siguen comprometidos a trabajar en colaboración con la WRU para llegar a un acuerdo que brinde un trato justo a todos. Instamos a la WRU a que vuelva a la mesa de diálogo para brindar las garantías de equidad e igualdad para todos los clubes que Ospreys y Scarlets han solicitado en beneficio del rugby galés".