El tenis, como la vida misma, está lleno de sorpresas y giros inesperados. En este caso, el protagonista es el canadiense Felix Auger-Aliassime (N°19 del ranking ATP), quién se consagró bicampeón en el ATP 500 de Basilea.
Auger-Aliassime coronó su gran semana con triunfo frente al polaco Hubert Hurkacz (N°11) por 7-6 (3) y 7-6 (5) en la final. En las rondas previas, también se había cargado al suizo Leandro Riedi (N°162), al neerlandés Botic Van De Zandschulp (N°65), al ruso Alexander Shevchenko (N°83) y al danés Holger Rune (N°6).
Se va de este torneo con su primera victoria ante un Top 10 (Rune) y su primer título de la temporada. No ascenderá puestos en el ranking, pero defendió con éxito los 500 puntos obtenidos en la temporada pasada para mantenerse en el Top 20.
El jugador de 23 años venía teniendo un año muy complicado con un balance de 22 victorias y 18 derrotas (10 de ellas en primera ronda). La última vez que había ganado cinco partidos en fila fue, justamente, en este mismo torneo la temporada pasada.
Es el quinto título de su carrera: Rotterdam, Florencia, Amberes y Basilea (X2). Tiene talento de sobra y, quizá, este fue el primer paso para recuperar la confianza.
Rápidamente se mudará a París para disputar el último Masters 1000 de la temporada. Tendrá una prueba de fuego frente al alemán Jan-Lennard Struff (N°27) para ver si puede mantener el nivel.